Leo a Joseph Conrad bajo el cielo que anuncia las primeras lluvias de primavera. Paseo por su narrativa breve, publicada al completo por Sexto Piso en una bella edición traducida por Carmen M. Cáceres y Andrés Barba. De vez en cuando suspendo la lectura para seguir leyendo más allá de la página.
No sé si me explico, pero pierdo la vista en la línea del horizonte donde el mar es un desgarro de sombras. Entonces el recuerdo me asalta y me lleva de viaje a Madrid, al Paseo de la Castellana 167, piso 11, ascensor, donde encontré a Mario Muchnik una de las últimas veces, ocupado como estaba en traducir las cartas de Joseph Conrad.