El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, destacó este jueves los esfuerzos "serios y creíbles" de Marruecos por encontrar una solución "justa" a la situación del Sahara Occidental, tras reunirse con el ministro marroquí de Exteriores, Nasser Bourita.
Borrell y Bourita, que se reunieron en Bruselas el miércoles, reiteraron en un comunicado conjunto emitido hoy su apoyo al proceso político de la ONU para lograr una "solución política, justa, realista, pragmática, duradera y mutuamente aceptable" sobre la cuestión del Sahara Occidental.
Recordaron que esa solución debe basarse en un compromiso conforme con las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y en concreto la resolución 2494 del pasado 30 de octubre, en la que la ONU prorrogó su misión en el Sahara Occidental durante un año, hasta octubre de 2020.
"El alto representante ha tomado nota positivamente de los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos" por alcanzar una solución, destacó Borrell, quien animó a todas las partes a "continuar su implicación con un espíritu de realismo y compromiso".
Marruecos presentó en 2007 una propuesta de autonomía para la zona y considera que esa debe ser la base de la negociación, mientras que el Frente Polisario insiste en la necesidad de convocar un referendo sobre el futuro de la antigua colonia española.
Borrell y Bourita reivindicaron la asociación euro-marroquí como marco para su "relación estratégica y privilegiada al servicio de los intereses mutuos".
Los dos se felicitaron de los progresos realizados desde el último consejo de asociación entre las dos partes, que se celebró en junio de 2019, y abogaron por seguir avanzando en la aplicación de esta asociación estructurada en cuatro espacios y dos ejes horizontales, así como por reforzar su eficacia.
"La asociación UE-Marruecos es más necesaria que nunca", enfatizaron, y estuvieron de acuerdo en que las dos partes "unan sus esfuerzos para estimular la cooperación regional en beneficio de la estabilidad, la prosperidad y un desarrollo inclusivo", así como para "responder mejor a los retos regionales y globales".
Sobre los "crecientes desafíos regionales", en particular en Libia y la región del Sahel, Borrell y Bourita reafirmaron su compromiso con la paz y la seguridad y dijeron estar dispuestos a continuar su apoyo a una solución política a la crisis libia.
Abordaron asimismo el proceso de paz en Oriente Medio y la reciente tensión en la región, según el comunicado.
Por otra parte, Borrell celebró la estabilidad de Marruecos, sus "profundas reformas" y las "considerables etapas" atravesadas en la vía de la modernización y el desarrollo.
"La singularidad de su modelo, así como los logros de la asociación UE-Marruecos en sus apartados político, económico, cultural y humano, hacen de Marruecos un socio privilegiado de la Unión Europea", subrayó el jefe de la diplomacia comunitaria.
