R. RIOJA
Preocupa las numerosas (van once ya) lesiones musculares.El Real Madrid, sin lateral izquierdo este miércoles ante Osasuna.Nada menos que trece lesiones acumula ya el Real Madrid desde que comenzó la pretemporada. La última ha sido la de Ferland Mendy, una baja que deja a los blancos sin ninguno de sus dos laterales izquierdos para el choque de este miércoles ante Osasuna (21 horas).
Lo más sorprendente de lo que empieza a parecerse ya a una plaga es las numerosas lesiones musculares han tenido los jugadores blancos: nada menos que once. Además, dos jugadores han 'repetido' y han causado baja en dos ocasiones: el propio Mendy y Brahim Díaz, que fue el primero en caer y todavía no ha podido debutar esta campaña.
La más grave de entre las lesiones ha sido la de Marco Asensio. El balear sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco externo de su rodilla izquierda en un partido de la pretemporada que le va a tener de baja en torno a los nueve meses, por lo que como pronto volverá al final de esta campaña.
Pero dejando a un lado la de Asensio, fruto sin duda de la mala suerte, lo que preocupa en la entidad madridista es las lesiones musculares. Mendy ha sufrido dos (la actual en el aductor izquierdo y una en el recto anterior del muslo derecho) y Brahim otras dos (bíceps femoral izquierdo y recto anterior derecho); y otros siete jugadores tuvieron una: Marcelo (cervicodorsaliga postraumática), Fede Valverde (recto anterior pierna izquierda), Modric (aductor pierna derecha), Isco (bíceps femoral derecho), James Rodríguez (sóleo derecho), Hazard (recto anterior muslo izquierdo) y Rodrygo (recto femoral derecho).
Todos esos problemas señalas al nuevo preparador físico, Grégory Dupont, que llegó de la selección francesa. El galo sustituyó este verano a Antonio Pintus, que también recibió la pasada campaña bastantes críticas por las numerosas lesiones musculares que hubo en el equipo en el tramo final del año.
Las numerosas lesiones dejaron al Madrid la pasada semana con solo tres centrocampistas y ahora hacen que no haya ni un solo lateral izquierdo. Zidane tendrá que improvisar una solución de emergencia ante Osasuna.