Este proyecto nació en 2022 como encargo del Gobierno de La Rioja para expandir hacia la cultura otras acciones del Valle de la Lengua –donde se ubican los monasterios, como San Millán de la Cogolla, donde nació la literatura en castellano– que ya existían. El trabajo de García en el Festival de Almagro, que abandonó en 2022 por desavenencias con la fundación que lo sustenta, fue lo que propició esta aproximación. “Conocían mi visión abierta, participativa, anticolonial, transversal… y me pidieron un proyecto”, recuerda García.
Durante seis meses, el gestor ideó y dio forma a algo que no existía y lo llamó así, Voces de la Lengua. Firmó el año pasado una cesión de derechos patrimoniales sobre la propiedad intelectual del proyecto, para que el Gobierno riojano lo usara para siempre, sin límite temporal, por 25.000 euros más IVA. Después, el Gobierno le encargó la dirección artística de ese mismo proyecto, firmando con él un contrato a partir de enero de 2023 de 75.000 euros anuales. En la rueda de prensa de este jueves, el consejero López Pastor dijo, erróneamente, que Ignacio García recibía unos ingresos de “más de 105.000 euros” en “este año”. García puntualiza que se han producido en dos ejercicios diferentes y por conceptos distintos. El consejero afirma que se trata de un sueldo “escandaloso” y de un “dispendio”. El presupuesto global para Voces de la Lengua en 2023 es de tres millones de euros.
Voces de la Lengua arrancó su programación desde el inicio del año y en ocho meses realizó más de 150 funciones, con más de 7.000 espectadores para espectáculos de música, poesía o narrativa, en más de 12 municipios, en los que se llevan la cultura al mundo rural y que ha contado con la presencia de nombres como José Sacristán, Pepe Viyuela, Silvia Marsó, Amancio Prada, Javier Gurruchaga o Vicente Navarro. Sacristán, que arrancó la programación en enero con aforo completo, hizo una lectura de Viejas historias de Castilla la Vieja, de Miguel Delibes, acompañado al violonchelo por Aurora Martínez en el Salón de la Lengua del Monasterio de Yuso.
Ignacio García explica a este periódico que, tras las elecciones del 28M, escribió una carta a los nuevos responsables políticos: Gonzalo Capellán como presidente de La Rioja y su consejero de Cultura, José Luis Pérez Pastor, para “ponerse a su disposición para explicarles el proyecto y trabajar con ellos”. “Ellos no me reciben ni me contestan siquiera, de entrada hay una falta de diálogo y actitud muy grosera al ni tan siquiera contestar”, añade. Tras una entrevista al presidente en la prensa riojana, en la que puso bajo sospecha la gestión de los fondos europeos y afirmó desconocer el salario de Ignacio García, este afirma que volvió a dirigirse al Gobierno por escrito para aportar la documentación que fuera necesaria y poder avanzar en la formalización de la contratación de las actuaciones de los espectáculos previstos para el verano.
Al fin se produce la reunión. “Les explico qué es Voces de la Lengua y cómo habla de la belleza del sonido del uso del español en todas sus manifestaciones, de lo culto a lo popular, de España a la América Latina”, desarrolla, y les entrega en mano el documento de programación de julio, agosto y septiembre, solicitando que activen la contratación cuando antes. “Pero sin informarme a mí y sin ningún tipo de diálogo, ellos eliminan íntegra la programación del mes de julio y de septiembre, y modifican cosas del mes de agosto, incluso añadiendo contenidos con los que yo no estoy de acuerdo”, afirma. “Es decir, que la Consejería de Cultura puede modificar los contenidos saltándose los criterios del director artístico y del espíritu del proyecto”, dice, “y esto para mí es injerencia política”. “Las modificaciones van contra el espíritu del proyecto porque eliminan todo lo que viene de América Latina y parte importante de lo nacional y dejan solo la programación local”, especifica. “Lo local, el apoyo a las industrias riojanas es parte fundamental del proyecto y valoramos mucho lo que hacen. Pero otra parte esencial es el diálogo entre lo local, lo nacional y lo internacional. Y eso lo están quebrando con sus decisiones unilaterales al eliminar contenidos”, afirma García a elDiario.es.
Cuando García hizo público en una carta la eliminación de estos contenidos, el mundo de la cultura se volcó en un comunicado difundido este jueves en defensa de la programación, firmado por nombres como José Sacristán, Emilio Gutiérrez Caba, Juan Mayorga o Jorge Volpi.
Entre la programación suprimida en julio había una representación de Bodas de sangre, de Federico García Lorca, y varios conciertos de Elena Aranoa y Gemma Viguera. Entre las de agosto, la representación de Los Milagros de Nuestra Señora de Gonzalo de Berceo, con Pepe Viyuela y Sara Águeda. Y en la de septiembre estaban previstos conciertos de Rocío Márquez & Bronquio, una de las revelaciones flamencas del año, Santiago Auserón, y también la obra teatral Volando voy, volando vengo dirigida por Nicolás Rivero.
Tras la rueda de prensa del consejero de Cultura, Ignacio García ha difundido este viernes un comunicado entre los medios de comunicación en el que se defiende de “las acusaciones sin prueba alguna” de Pérez Pastor y pide “que se disculpe”. Además, ha conminado a que el presidente comparta los “contratos en su totalidad, ya que servirán para dejar claros los incumplimientos de los mismos que él está haciendo, y cuyo cumplimiento se defenderá jurídicamente”.
Aunque Ignacio García, como autor del proyecto, haga una cesión al Gobierno riojano para su explotación, no quiere decir que no siga siendo el titular de esos derechos protegidos por la Ley de propiedad intelectual. Por ello “exige” el derecho al respeto e integridad de la obra e impedir cualquier deformación, modificación, alteración o atentado contra ella”. García considera que puede apelar a esta ley debido a las modificaciones que el Gobierno de La Rioja está realizando a su proyecto: “Considero que los cambios unilaterales en la naturaleza del programa que ha introducido el Consejero atentan contra la obra y la deforman”, afirma.
Esta misma semana, José Luis Pérez Pastor también ha sido parte de la actualidad porque ha anunciado que quiere retirar el nombre de Almudena Grandes a una biblioteca regional, justificándolo por que “no era lo más adecuado, en el sentido de que la vinculación de Almudena Grandes con la Biblioteca regional no era más allá de la decisión arbitraria de hacerlo". Y lo ha considerado un homenaje “mal ejecutado”.