“Cuando llegamos, se tramitó la visa de estudiante. Dicen que veníamos a trabajar, pero todo eso es mentira. Veníamos a prácticas para representar luego en México el musical, y allí va a estar laboralmente pagado, pero ahorita éramos becados”, ha explicado sobre cómo fue el aterrizaje en España.
Esta bailarina se ha sumado a la ronda de declaraciones en la que han ido participando la denunciante Leslie Guadalupe, la Policía implicada en la investigación –que negó este miércoles haber recibido presiones de ningún tipo–, el responsable del hostal en el que se hospedaron los jóvenes y el responsable de la Fundación Arte para Cantar. El próximo lunes 13 de enero será el turno de Nacho Cano.
Alfredo Arrién, abogado de Leslie Guadalupe, ha declarado que, pese a que la sesión “se ha enturbiado bastante”, ha sido “favorable” para su representada. “Se ha reconocido que los ensayos iban dirigidos directamente a hacer un rol en concreto. Recordemos que la ley que regula el trabajo de los artistas prevé que el 70% de su trabajo son los ensayos y solo un 30% la representación”, ha afirmado, “entonces, los ensayos son una parte de un convenio regulado por la Ley de Dirección de los Trabajadores y, por consiguiente, es un conjunto de trabajo y por consiguiente están trabajando”.
“Ella ha intentado favorecer lo más posible a la organización de Malinche, evidentemente, porque tiene sus propios intereses”, ha valorado el letrado sobre la declaración de Victoria Hernández Rivera, que comparte abogados con Nacho Cano.
“Ha confirmado a medias tintas lo que ya sabíamos por Leslie, se ha confirmado la vulneración de la frontera en España, cómo ocultó que iba a trabajar realmente para Malinche, que en todo momento dijo que venía de turista y cómo fue obviamente, pagando todos los gastos de transporte”, ha añadido antes de subrayar lo que ha considerado como “elemento esencial”: “Ella era menor de edad cuando vino”.
“Quiero que conozcan la verdad”Victoria Hernández Rivera ha asegurado que la jueza responsable del caso “no ha ayudado mucho” en su declaración: “Sus preguntas trataban de difamarme”. “Yo he sido superobjetiva para que conozcan nuestra historia, que conozcan la verdad, porque no hay mentiras en nada de esto”, ha sumado.
La joven mexicana ha sostenido que, pese a que “todo el mundo piensa que todo se hizo mal, y que los procesos jurídicos y administrativos están mal, no es cierto. Todo ha sido en forma y legal”. “Me voy satisfecha pero un poco intranquila, porque no sé hasta qué punto la jueza puede dañarnos”, ha valorado.
Respecto a su relación con la compañera que denunció, Leslie Guadalupe, ha descrito que durante las “dos semanas” que coincidieron, ella fue “muy conflictiva, nunca hubo match”. Ambas compartieron cuarto y, según ha señalado, “siempre había una vibra muy extraña”. “A mí nunca me hizo nada. En su momento robó alguna comida o no pagaba el bus. Cosas que ya sabemos que se deben hacer”, ha acusado.
La defensa de Nacho Cano, por su parte, continúa quejándose sobre cómo está siendo el proceso y la manera de proceder por parte de la jueza responsable del caso, incidiendo en la postura que el exmiembro de Mecano lleva defendiendo desde que fuera llamado a comparecer por primera vez ante la Policía el pasado mes de julio: ser víctima de un complot por apoyar a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. “Se trata de buscar irregularidades donde no las hay”, ha descrito su abogado, José Luis González-Montes.