La canción, en la que los dos artistas combinan su voz luego de que el argentino Alejo Stival se dedicara íntegramente a la producción en 19 días y 500 noches (1999), es una nueva versión del tema que ya había aparecido en el último álbum de Stivel, Yo era un animal (2017). Según se confirma en la nota de prensa, tiene una fuerte carga autobiográfica y “resonó profundamente” en Sabina, quien al escucharla comentó que parecía que había sido escrita pensando en él. Es de esa forma como nació la idea de volver a grabarla juntos.
El rock de esta reinterpretación toma forma con el llamativo videoclip, producido mediante inteligencia artificial para recrear las versiones jóvenes de Joaquín Sabina y Alejo Stivel. Estas imágenes, descritas por la discográfica como “sorprendentes y futuristas”, se estrenan en un contexto en el que el mundo del arte se debate por cómo tratar de convivir con la nueva realidad digital. “La canción tenía algo de Sabina, y él lo sintió enseguida. Fue un lujo grabarla juntos después de tantos años”, dice Alejo Stivel sobre la colaboración.
El proyecto ha sido posible gracias a la buena relación que tanto Alejo Stivel como Joaquín Sabina han mantenido entre ellos desde su trabajo en 19 días y 500 noches, disco clave en la trayectoria de Sabina por la canción que da título al álbum, convertida ahora en uno de sus mayores hits. Además, el disco es considerado uno de los más personales y autobiográficos del cantautor ubetense, y cuenta con una producción que, en palabras de Stivel, buscaba extraer la verdadera esencia de la voz de Sabina.
“Para mí, ese fue el punto culmen de mi carrera como productor. Sabina tiene esa capacidad única de mostrar lo más vulnerable de sí mismo, y eso lo captamos en ese disco”, expresa Stivel en la nota de prensa. El artista argentino cuenta que estuvieron un año trabajando en ese álbum y que, aunque “no fue fácil”, Joaquín Sabina tiene “una manera de componer y de interpretar única”. “A lo largo de los años, hemos compartido mucho más que música”, dice Stivel, alegando que Sabina es “un verdadero poeta de la vida”, lo que hace que su “relación sea especial”.
Aparte del lanzamiento de este videoclip, en el que los músicos buscan combinar “la complicidad” y “el respeto mutuo” que forjaron en aquella época, Alejo Stivel prepara un concierto para el próximo 13 de marzo en el Teatro Barceló de Madrid. Allí hará un repaso de su carrera, lo que supondrá una oportunidad para disfrutar de sus clásicos, tanto en solitario como con Tequila, así como de este nuevo capítulo de su carrera. Las entradas ya están a la venta. Asimismo, Sabina se despirá de los escenarios este 2025 con una última y multitudinaria gira que lleva el nombre de Hola y Adiós.
