Activistas de la organización ecologista Greenpeace bloquean desde hoy la terminal del puerto polaco de Gdansk para impedir la descarga de carbón, en un país donde este carburante representa casi el 80% de la energía.
Los miembros de Greenpeace han colgado carteles en las grúas de descarga donde puede leerse "Polonia sin carbón", en una acción con la que se exige al Gobierno que ponga en marcha un plan creíble para abandonar el uso del mineral para el año 2030, de acuerdo a las previsiones de la Unión Europea.
Mientras, 18 activistas de esta organización ecologistas, todos tripulantes del icónico barco de Greenpeace, el "Rainbow Warrior", permanecen detenidos en Gdansk después de que ayer la policía polaca de fronteras asaltase la embarcación cuando ésta bloqueaba la entrada a la terminal de carbón del puerto.
Los agentes, armados y de manera espectacular, accedieron al interior del barco en plena madrugada, rompiendo sus ventanas y obligando a sus ocupantes a permanecer echados en el suelo con las manos a la vista mientras se procedía al registro, según muestra un vídeo difundido por la propia organización ecologista.
El "Rainbow Warrior" pretendía impedir la llegada a puerto de un barco cargado de carbón procedente de Mozambique.
"En lugar de preocuparse por la seguridad de los polacos, el bienestar de su sociedad, la limpieza del medio ambiente y el interés nacional, nuestro Gobierno defiende los intereses del lobby del carbón y los importadores de combustibles extranjeros", subrayó el director del programa de energía de Greenpeace Polska, Pawel Szypulsk.
El carbón representa casi el 80 % del mix energético polaco, lo que supone que 33 de las 50 ciudades más contaminadas de Europa se encuentren en Polonia, según la Organización Mundial de la Salud, y causa 45.000 muertes prematuras al año en un país de algo más de 38 millones de habitantes.
Desde el Gobierno polaco se asegura que se hacen esfuerzos para reducir el uso del carbón, aunque también se reconoce que el crecimiento vigoroso que experimenta la economía polaca en las últimas décadas precisa de fuentes de energía asequibles.
El puerto de Gdansk es el principal puerto de llegada de mercancías en Polonia y uno de los principales del mar Báltico.