Sorpresa en el juicio contra los autodenominados 'Once Solidarios del Reconquista'. La Fiscalía ha retirado este lunes las acusaciones contra los once manifestantes imputados por una protesta contra la política laboral del Hotel de la Reconquista de Oviedo en enero de 2018. El Ministerio Público ha dado un paso atrás tras escuchar las declaraciones y valorar las pruebas en el juicio, después de que en agosto pidiera multas de entre 2.200 y 2.500 euros para los imputados por un delito de desórdenes públicos, otro leve de amenazas y otro leve de maltrato de obra, por una presunta agresión.

La protesta investigada se remonta al 11 de enero de 2018.

Un grupo reducido de personas –entre las que se encuentran estudiantes, jubilados y sindicalistas– interrumpió la rueda de prensa de presentación de Fitur que se estaba celebrando en un salón del emblemático hotel ovetense. La acción, que captaron medios como La Voz de Asturias, solo retrasó unos minutos el acto.

Los manifestantes denunciaron las prácticas laborales del hotel, del Grupo Hotusa, con una condena firme por acoso a una trabajadora y una sentencia del TSJ de Asturias que declaró nulo el despido de de Raquel Agüeros, ex presidenta del comité de empresa de CCOO.

La entonces directora del hotel denunció en los tribunales que existió violencia por parte de los manifestantes a su entrada al salón de actos, una acusación que suscribieron dos trabajadores, uno de ellos delegado de UGT.

La directora y el representante sindical ejercen la acusación particular, que solicita penas de seis meses de prisión para cada uno de los imputados por la supuesta agresión, amenazas e insultos, además de una indemnización de 6.000 euros para la directora por daños morales. 

La Fiscalía por su parte pidió el pasado mes de agosto multas que oscilaban entre unos 2.200 y 2.500 euros para los once imputados por distintos delitos de desórdenes públicos, amenazas y maltrato de obra, como recogieron medios regionales. Este lunes, el Ministerio Público dio un paso atrás. 

Fuentes de la Fiscalía confirman a eldiario.es que se retiraron este lunes todas las acusaciones porque, "aunque hubo una interrupción del acto, se considera que los hechos no tuvieron relevancia penal".  

Manifestantes: "Esto son denuncias falsas"

"Es que es evidente. Hasta la Fiscalía ha dicho hoy claro que no queda acreditada la violencia", celebra Marco Antuña, sindicalista del CSI e imputado que ejerce de portavoz de los once manifestantes. 

Antuña había sido muy crítico con las acusaciones presentadas en agosto por el Ministerio Fiscal, que calificó como "franquista". "Entonces la Fiscalía no fue ni a los interrogatorios, hizo un corta y pega de unas acusaciones falsas", critica el sindicalista de nuevo este lunes, aunque celebra que el fiscal presente esta mañana en el juicio haya retirado finalmente todos los cargos.

Para el portavoz de los manifestantes, el movimiento de la Fiscalía de este lunes es una muestra de su inocencia. "Han sido seis horas de juicio. Se han visto todas las pruebas, los interrogatorios y el fiscal dice que no queda acreditada la violencia, los policías afirman también que no tuvieron que intervenir, que fuimos pacíficos... Nosotros insistimos: esto son denuncias falsas que buscan criminalizar la protesta social". 

"Lo que pedimos es que se nos juzgue por lo que hemos hecho, no por lo que no hemos hecho. No hubo ningún tipo de violencia", reitera Antuña. Los imputados difundieron un vídeo del momento de la entrada al salón, con el que defienden que queda acreditado que no existió esa presunta agresión. 

La acusación particular ha mantenido sus cargos en el día de hoy. Según recoge la agencia Efe, presente en el juicio, la entonces directora ha afirmado que "el acusado me insultó, diciéndome que era una esclava de mierda y que el Hotel es de los asturianos". Dos periodistas que cubrieron el acto de enero de 2018 han declarado que no vieron que se produjera ninguna violencia.  

Los manifestantes tendrán que esperar a la sentencia para conocer si son finalmente condenados. Este lunes, varias decenas de personas han acompañado a los imputados con una concentración de protesta en los juzgados de lo penal de Oviedo en la que han reivindicado que "la solidaridad no es delito".