El grupo Fiat Chrysler (FCA) vendió en lo que va de año 1.661.144 vehículos en Estados Unidos, un 1 % menos que en 2018, mientras que en el tercer trimestre las ventas se mantuvieron en los mismos niveles, con la entrega de 565.034 unidades, gracias a la demanda de automóviles de la marca Ram, informó este miércoles el fabricante.
De hecho, todas las marcas del grupo registraron pérdidas en el tercer trimestre excepto Ram, especializada en la producción de camionetas y furgonetas, cuyas ventas aumentaron un 15 % y alcanzaron los 179.200 vehículos.
El éxito de Ram durante el trimestre se cimentó en la aceptación de las camionetas "pickup" de la marca, con la entrega de 161.635 unidades, un 14 % más que en 2018, y la furgoneta Promaster, que ganó un 30 % con 14.589 unidades.
Las ventas de Jeep, especializado en la producción de todoterrenos y todocaminos SUV y que se ha convertido en la espina dorsal del fabricante, cayeron un 2 %, hasta 245.474 vehículos.
Mientras, la marca Chrysler, que produce vehículos y monovolúmenes, redujo sus ventas un 23 %, a 29.544 unidades. Dodge, en el pasado la marca de productos de consumo masivo, perdió un 4 % de su demanda al reducir sus ventas a 104.146 unidades.
Aunque el consumidor estadounidense cada vez más deja de comprar automóviles en favor de los todocaminos SUV, Dodge fue capaz de alcanzar ventas récord de dos de sus modelos más emblemáticos, Charger y Challenger.
Los dos automóviles son iconos de los llamados "muscle car", vehículos de altas prestaciones que trazan sus orígenes a la época dorada del automóvil estadounidense, las décadas de los años sesenta y setenta del siglo pasado.
Las dos marcas italianas del grupo, Fiat y Alfa Romeo, sufrieron fuertes pérdidas: Fiat disminuyó un 38 %, a 2.360 unidades, y Alfa Romeo un 27 %, a 4.310.
Los conocidos como los Tres Grandes de Detroit (General Motors, Ford y FCA) han empezado a informar sobre sus cifras de ventas trimestralmente mientras que el resto del sector mantiene los reportes mensuales.