La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha anunciado este martes la convocatoria de una jornada de huelga para el próximo 13 de febrero, a la que están llamados más de medio millón de trabajadores públicos, “ante la incertidumbre en la atención sanitaria del personal funcionario por la falta de acuerdo definitivo entre Gobierno y aseguradoras que permita la firma del próximo concierto sanitario”.

La medida llega justo cuando parece que el acuerdo está más cercano, después de que el Ministerio de Función Pública se abriese a compensar los costes extraordinarios de las aseguradores y suspendiese el plazo de presentación al concierto, que finalizaba este lunes, para hacer “correcciones” en la licitación y de que Adeslas, que actualmente presta servicio al mayor número de funcionarios y familiares, asegurase que con esos cambios “reconsideraría” su negativa.

“Valoramos el acercamiento de posturas con Adeslas conocido este fin de semana y la voluntad de Muface para alcanzar un acuerdo modificando las condiciones ofrecidas a las aseguradoras y dejando sin efecto el plazo de presentación de ofertas”, señalan desde el sindicato, que se atribuye este movimiento. Aun así, indican que han “decidido mantener las medidas de presión hasta que se conozca un acuerdo concluyente que termine con la incertidumbre” de los mutualistas.

En total, 1,5 millones de personas, entre personal funcionario y sus familiares, optan por un seguro privado, frente a la sanidad pública. Sin embargo, esta convocatoria afecta a algo más de medio millón. Están llamados a la huelga el personal docente, el que trabaja en los centros de la Administración General del Estado y a Correos.