La construcción del metro de Bogotá dio este jueves un paso definitivo al cerrarse el proceso de licitación para su construcción y operación, con lo que los habitantes de la capital colombiana comienzan acariciar un proyecto con el que sueñan desde 1942.
La Empresa Metro de Bogotá cerró el proceso de licitación en el que participaron cinco consorcios compuestos por compañías de 12 países asiáticos, americanos y europeos, aunque tres de ellos se apartaron del proceso en el último momento.
El metro, cuyo coste se ha presupuestado en 12,9 billones de pesos (unos 3.736 millones de pesos al cambio de hoy), se ha convertido en los últimos años en un punto decisivo para las elecciones a la Alcaldía, si bien ninguno de los mandatarios locales ha conseguido concretar su construcción.
1.DE CHINA A ESPAÑA, EMPRESAS DE MEDIO MUNDO ASPIRAN A CONSTRUIRLO
El pasado 28 de junio las autoridades abrieron la licitación para la construcción y operación del metro elevado en Bogotá, la única gran ciudad latinoamericana que no cuenta con uno.
Los consorcios Unión Metro Capital, Sunrise y APCA Metro Capital se retiraron de la carrera por su construcción, mientras que otros dos presentaron sus propuestas para la construcción de 23,9 kilómetros y 16 estaciones en los que viajarán 72.000 pasajeros por hora y sentido, lo que implica más de un millón de personas al día.
Uno de los consorcios que siguen en la carrera por la construcción es Metro de Bogotá, que está conformado por las empresas FCC Concesiones de Infraestructura de España y las mexicanas Carso y Promotora del Desarrollo de América Latina.
De igual forma continúa APCA Transmimetro, integrado por las compañías chinas Harbour Engineeering Company Limited y Xi'An Metro Company Limited.
2. UNA PROMESA DESDE 1942
Desde la primera mitad del siglo XX los habitantes de Bogotá escucharon hablar por primera vez sobre la construcción de un metro en una ciudad en la que ahora viven más de 8 millones de personas y en la que el caos vial es diario.
En 1942, el entonces alcalde Carlos Sanz de Santamaría propuso la construcción de un metro para beneficiar a los 400.000 habitantes de la época y siete años más tarde el alcalde Fernando Mazuera incluyó en su plan de trabajo su construcción.
Incluso el entonces dictador Gustavo Rojas Pinilla llegó a contratar en 1957 una firma japonesa para su construcción pero los siguientes gobiernos descartaron la idea.
En los últimos años del siglo pasado los alcaldes presentaron diversas propuestas para la construcción del metro, pero la falta de voluntad política, las barreras de financiación, los costos y la dificultad para acceder a créditos frustraron esas intenciones.
3. EL ETERNO PROBLEMA DE LA MOVILIDAD
Los problemas de movilidad y seguridad son las principales preocupaciones y necesidades de los habitantes de Bogotá, lo que ha llevado a centrar las propuestas de los candidatos a la Alcaldía incluso para las elecciones locales del próximo 27 de octubre.
Según un estudio de la plataforma ciudadana "Bogotá cómo vamos" publicado en julio pasado, el parque automotor de la capital se ha duplicado en una década, al pasar de 1,2 millones de vehículos en 2008 a 2,3 millones el año pasado.
El transporte particular es el que más ha crecido al llegar a 1,7 millones de carros, mientras que en el público solo hay 111.831 vehículos, lo que ha ocasionado un mayor tráfico en avenidas que con el pasar de los años se han quedado pequeñas.
Además, los niveles de satisfacción con el transporte público han caído progresivamente entre 2008 y 2018. Sobre Transmilenio, el principal medio de transporte público, este indicador pasó del 49 % al 13 %, mientras que el vehículo particular subió el año pasado al 63 %.
De igual forma, el 61 % de los habitantes de la ciudad opinó el año pasado que los trayectos habituales han durado más tiempo de lo normal, mientras que en 2008 el porcentaje era del 26 %.
4. LAS CRÍTICAS AL METRO
Pese a la importancia e insistencia para su construcción, el actual proyecto de metro para Bogotá no ha estado exento de críticas, principalmente por Hollman Morris, candidato a la Alcaldía en los próximos comicios por el movimiento de izquierdas Colombia Humana.
Morris ha criticado en varias oportunidades la construcción del metro elevado, pues asegura que lo mejor para la ciudad por costos es uno subterráneo, tal como lo propuso el exalcalde Gustavo Petro.
El candidato calificó este jueves como "turbia" la licitación del metro y afirmó que se ha ocultado información a la opinión pública "con la excusa de que licitan bajo normas internacionales del (Banco Interamericano de Desarrollo) BID".
Por eso ha demandado su construcción al considerar que la Alcaldía no cumplió con los requisitos sobre la financiación del proyecto.
No obstante, en una primera instancia el Juzgado 16 Administrativo de Oralidad del Circuito Judicial de la capital rechazó la demanda con la que se pretendía buscar la caducidad de esta financiación.
Esa decisión fue ratificada a inicios de septiembre pasado por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, que consideró se cumplió en su totalidad con los requisitos.