Otras elecciones generales que, como dibujaban muchas encuestas, no han alumbrado un escenario parlamentario que facilite el desbloqueo político. El PSOE vuelve a ganar las elecciones, pero sin una mayoría fácil para gobernar, mientras la derecha no consigue sumar. Los sindicatos mayoritarios y las patronales de empresarios, así como los colectivos de autónomos, han salido en tromba este lunes para repetir un mismo mensaje a los partidos políticos: no puede haber otras elecciones. Cada protagonista, eso sí, con intereses distintos que presionan para el que próximo Ejecutivo se incline hacia la izquierda o "la moderación".

Los sindicatos mayoritarios recuerdan que las urnas el 10N han vuelto a dar mayoría a las fuerzas progresistas frente a "las tres derechas" que no han logrado sumar.

Por un lado, el auge de la extrema derecha de Vox y, por otro, la pérdida (aunque no muy acusada) de respaldo de la ciudadanía a las fuerzas progresistas, que obliga a buscar apoyos en más formaciones políticas de distinto signo.

Pepe Álvarez, secretario general de UGT, ha pedido a PSOE y Unidas Podemos que entiendan que "los ciudadanos les han dado una segunda oportunidad, pero más ajustada" y les ha emplazado a que "se dejen de otras cuestiones, que hemos tenido la sensación de que tenían un carácter más personal". De lo contrario, el líder sindical cree "que la situación va a empeorar".

En la misma clave casi de última oportunidad, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, sostiene a eldiario.es que la negociación tras estos comicios "no debe tomar la forma que tomó después de abril, cuando se plantearon a muy largo plazo, casi como una estrategia de desgaste de las posiciones de los otros y dejando el acuerdo programático casi como algo secundario".

Sordo explica que este martes planteará a la Ejecutiva del sindicato la "reflexión" de que CCOO y UGT puedan poner sobre la mesa una "posición de mínimos" en materia laboral, fiscal y de pensiones que "facilite el acercamiento de una mayoría parlamentaria, que no es solo del PSOE y Unidas Podemos, que son lo que tienen que poner el vector central, pero que en exclusiva no van a poder hacer absolutamente nada".

El PSOE ya ha avanzado este lunes que intentará formar Gobierno sin el apoyo del PP y los independentistas, lo que le lleva a tratar de conseguir votos a favor en la investidura de Pedro Sánchez de partidos como Ciudadanos y PNV, entre otros. Unai Sordo subraya a este medio que la intención de CCOO no pasa por una "devaluación de las posiciones sindicales, sino por ser conscientes de que es tan complejo el panorama, y va a haber que apelar a 5 o 6 fuerzas políticas, que un mínimo compartido se puede poner encima de la mesa". 

Álvarez por su parte se ha dirigido en varias ocasiones a las fuerzas independentistas. En UGT señalan especialmente a ERC, como partido que comparte una agenda progresista, y advierten de la necesidad de superar la estrategia del procés para centrar los esfuerzos en buscar un Gobierno que permita un diálogo en Catalunya y una agenda de políticas sociales que mejoren la situación del conjunto de la población.

A igual que los sindicatos llaman con claridad a la responsabilidad de las fuerzas de izquierdas, la patronal CEOE también ha instado este lunes a la "responsabilidad" de los partidos que representan la "moderación". Con un mensaje más dirigido a PP y Ciudadanos, aunque no mencionados expresamente, el presidente de la CEOE ha pedido que se facilite la formación urgente de un Gobierno que apueste por el "rigor presupuestario y la estabilidad económica y esa estabilidad viene a través de esa moderación y ese rigor". 

Antonio Garamendi ha rechazado "entrar en siglas" de qué partidos políticos deberían formar o facilitar la formación del nuevo Ejecutivo, pero ha defendido que "en otros países europeos en un momento dado se da transversalidad y posiblemente aquí también va a haber que hablar de transversalidad". En el mismo sentido se ha pronunciado la patronal catalana Foment del Treball y la patronal de las pequeñas empresas Cepyme. En el telón de fondo, los empresarios recuerdan el contexto de desaceleración económica que exige de estabilidad política para hacerle frente.

El escenario que no quieren contemplar ni de lejos los empresarios, según ha destacado Garamendi, es el de unas nuevas elecciones generales tras estas del 10N. "Les pedimos que pongan la responsabilidad y el sentido de Estado encima de la mesa. De aquí a un mes hay que montar un Gobierno y un país estable para los próximos cuatro años", ha afirmado el líder empresarial. 

Más concreto ha sido el vicepresidente de CEOE y presidente del colectivo de autónomos ATA, Lorenzo Amor, que ha abogado por la abstención del PP para hacer presidente a Pedro Sánchez. "Si era ‘de responsabilidad’ para el país la abstención del PSOE que facilitaba un gobierno del PP en 2016, también es de responsabilidad una abstención del PP ahora que facilite un gobierno del PSOE. Pensar lo contrario, es no ser precisamente responsable", ha defendido Amor.

La organización de autónomos progresista UATAE ha hecho un llamamiento a los partidos progresistas "para que antepongan las necesidades de la ciudadanía, y especialmente de los más de tres millones de autónomos y autónomas, a los intereses partidistas o los cálculos electorales", así como UPTA (vinculada a UGT), que ha apostado por el diálogo ya que "los autónomos no aceptarían una repetición de los comicios".