El fabricante de equipamiento de internet Cisco presentó este miércoles unos beneficios netos de 2.926 millones de dólares en el primer trimestre de su año fiscal 2020, lo que representa un 17,5 % menos que los 3.549 millones del mismo período del ejercicio anterior.
Entre agosto y octubre, la multinacional con sede en San José (California) facturó 13.159 millones de dólares, una cifra ligeramente superior a los 13.072 de los tres primeros meses de 2019, pero un incremento de los costos de reestructuración y, sobre todo, fiscales, hizo que los beneficios bajasen pese al aumento de ingresos.
Por su parte, los accionistas de Cisco recibieron unos beneficios netos en este último período de 69 centavos por título, frente a los 78 centavos del primer trimestre del año pasado.
Los beneficios antes de intereses e impuestos de la compañía tecnológica fueron de 3.579 millones de dólares y la empresa mantuvo estable su deuda a largo plazo en 14.497 millones.
Por segmentos de mercado, las "plataformas de infraestructura", que incluyen "routers" y otros dispositivos de internet, supusieron 7.538 millones en ventas, un descenso del 1 %, mientras que los productos de seguridad, una de las apuestas estratégicas de la empresa, facturaron 815 millones, un 22 % más.
"Hemos tenido un trimestre sólido pese a una coyuntura difícil. Estamos centrados en la innovación, la transformación de nuestro negocio y la voluntad de superar las expectativas de nuestros clientes", indicó el consejero delegado de la tecnológica, Chuck Robbins.
Los resultados de Cisco no convencieron a los inversores en Wall Street y sus acciones se dejaban un 5,08 % hasta los 46 dólares por título en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de los parqués neoyorquinos.