El canal de empresas volverá a distorsionar en noviembre la cifra de matriculaciones de turismos, que el sector dará a conocer este lunes, ya que las marcas han intensificado las automatriculaciones para dar salida a vehículos cuyas emisiones de CO2 superan el límite impuesto por Bruselas para 2020.

El aumento de las matriculaciones en el canal de empresas compensará la caída prevista en el de particulares, por lo que se espera que la cifra global se mantenga en un nivel similar al de noviembre de 2018.

Al ritmo normal de relevo de flotas por parte de algunas empresas y al auge del "renting"-alquiler a largo plazo- se ha sumado un volcán en erupción: hay un importante número de coches nuevos a gasolina que emiten CO2 muy por encima de los 95 gramos por kilómetro, el límite impuesto por la Unión Europea (UE) a partir del próximo 1 de enero.

Las marcas y el CO2 aprietan a los concesionarios para cumplir los objetivos comerciales y, además, dar salida a esas existencias, compuestas mayoritariamente por vehículos con motores a gasolina.

Se impone matricular ante la inminente puesta en marcha del contador de las multas en Bruselas. La consecuencia es que los concesionarios se están poblando de coches kilómetro cero, si bien las ofertas pueden ser atractivas para el consumidor.

Según la patronal de los concesionarios (Faconauto) estos coches ya superan ampliamente la barrera de los 100.000, impolutos y a la espera de nuevos dueños en el circuito de usados.

El mercado ya se vio mediatizado por este motivo en octubre, con un 28,8 % más de matriculaciones de turismos en el canal de empresas para un repunte global del 6,3 %.

La tónica se va a repetir en noviembre, con un alza previsto del 29 % en empresas para una tasa interanual plana en el conjunto, y la secuencia se prevé idéntica en el último mes del año.

Entretanto, el canal de particulares, que es el verdadero termómetro para el sector, volverá a caer en noviembre en torno al 5 %, según han adelantado fuentes del sector, tras el descenso de octubre (12,4 %).

La previsión de las patronales para final de año es que las matriculaciones de turismos y todoterrenos caigan un 5,9 % en comparación con el ejercicio anterior, con 1.150.322 unidades comercializadas frente a 1.321.438 de 2018.