Honduras pagó en el tercer trimestre de 2019 un total de 1.149,8 millones de dólares por concepto de importaciones petroleras, 0,5 % menos que en el mismo periodo de 2018, y compró 1,8 millones de barriles más de hidrocarburos, informó este viernes el Banco Central del país.
En los primeros nueve meses la compra de combustibles, lubricantes y búnker para generación de energía eléctrica en Honduras disminuyó 5,3 millones de dólares con relación al mismo periodo del año pasado (1.155,1 millones de dólares), indicó el Banco Central en un informe.
La disminución en la factura petrolera en el tercer trimestre obedece a la baja en el precio internacional del 11,5 %, pero fue contrarrestada por el alza en volumen importado del 12,5 %, detalla la entidad.
En el caso del diesel, los hondureños pagaron por su importación 420,8 millones de dólares, un 3,5 % menos que en los primeros nueve meses de 2018, cuando compraron 436,1 millones de dólares, añade.
El organismo señaló que la compra de gasolina superior y regular le costó a Honduras 368,6 millones de dólares, un 8 % menos que en el mismo periodo de 2018, cuando llegó a 400,9 millones de dólares.
La importación de búnker, principal materia prima para la generación de energía térmica, por 253 millones de dólares, aumentó 35 % con relación al mismo lapso de 2018, cuando ascendió a 187,4 millones de dólares.
También señaló que se compraron 107,4 millones de dólares en queroseno y gas licuado para uso doméstico.
En el tercer trimestre de 2019 se importaron 16,1 millones de barriles de derivados del petróleo, lo que representa 1,8 millones de barriles más a lo comprado en el mismo periodo de 2018, cuando sumaron 14,3 millones de barriles, según el informe del Banco Central.
El organismo incluyó en la factura petrolera del tercer trimestre la compra de energía eléctrica que Honduras hizo a otros países centroamericanos, que no identifica, por 18,8 millones de dólares, 16,1 % menos a los 22,4 millones comprados en los primeros nueve meses del año pasado.