El candidato opositor venezolano Edmundo González Urrutia se ha reivindicado este viernes desde La Toja como “presidente electo” en el proceso electoral del pasado 28 de julio, como reclama la oposición y han rechazado el gobierno, el Consejo Electoral o los tribunales de Venezuela, y ha puesto los 'Pactos de la Moncloa' de la transición española a la democracia como ejemplo para recuperar la normalidad institucional del país caribeño.

“Voy a regresar lo más pronto posible, cuando restauremos la democracia en el país. El 10 de enero es la fecha que constitucionalmente está prevista para la toma de posesión y yo aspiro a que la voluntad popular de ocho millones de venezolanos se acredite ese día”, ha aseverado Edmundo González, quien incluso ha llegado a bromear al respecto: “Si el presidente Maduro adelantó la Navidad, no sería raro que yo pueda adelantar mi regreso también”.

González Urrutia ha subrayado durante su intervención en el Foro La Toja, organizado por el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy y que se celebra en la localidad pontevedresa de O Grove, el valor de los acuerdos de gobernabilidad suscritos en Venezuela en 1958, que “aseguraron un clima de amplias libertades políticas y económicas”.

“[Ustedes] tuvieron un marco de referencia para el diseño del Pacto de la Moncloa de 1977, o para dar soporte, en el caso de Chile, a partir de 1990, a la experiencia de la concertación democrática. Nada menos que eso quisiéramos los venezolanos sentir en este momento y, por tanto, que en prenda de retribución nuestra comunidad iberoamericana pudiera aportar su apoyo en términos enérgicos y efectivos para que nuestro país logre transitar de nuevo hacia la normalidad institucional”, ha argumentado.

Además, ha insistido en que su salida del país es “temporal”, destacando su papel actual de “vocero y gestor de cuantas acciones y diligencias puedan estar con el fin de motorizar la solidaridad española, y por extensión del resto de Europa, con la causa democrática venezolana”.

“Lo hago con la plena responsabilidad que me confiere mi carácter de presidente electo, así reconocido por millones de venezolanos, ocho millones para ser exactos, y por buena parte de la comunidad internacional”, ha expresado González, que se ha reivindicado como ganador de las elecciones presidenciales de julio dos días después de que el Centro Carter haya presentado ante la OEA las actas electorales que le darían la victoria.

Después de señalar que su tarea es “compleja y exigente”, ha defendido que más de dos meses después de las elecciones presidenciales en el país, “el mundo conoce y reconoce las actas originales”: “Porque las hemos mostrado de manera transparente”. A su vez, González ha denunciado que la respuesta del “régimen” de Nicolás Maduro “ha sido un alarmante saldo de fallecidos, perseguidos, presos políticos, tanto cuadros juveniles como destacados dirigentes de la oposición, como María Colina Machado, algo ante lo cual no puede ser indiferente ningún pueblo del mundo”.

“No hay dos Venezuelas, hay una sola. La democrática, avalada por millones de votos obtenidos el 28 de julio pasado. No hay dilema. Lo que queremos, lo que anhelamos, es dejar atrás el personalismo y la improvisación, así como la intolerancia y la persecución a mansalva de otros venezolanos”, ha señalado el venezolano, que pide “recuperar la institucionalidad” y “recobrar el valor del diálogo y la convivencia” para reconstruir “la imagen” del país.

El candidato opositor venezolano Edmundo González ha solicitado formalmente asilo político esta semana en España, según ha anunciado este viernes el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ante la Comisión de Exteriores del Congreso.

Tras afear “el uso partidista y politiquero que algunos hacen de la dramática situación que vive el pueblo venezolano”, Albares ha esgrimido que la decisión de Edmundo González de solicitar asilo “ha sido personal y libre suya”, tal y como él mismo ratificó en un comunicado, y ha añadido que el Gobierno acogió a Edmundo González “como en el pasado acogió a Leopoldo López y tantos otros por razones humanitarias”.

En cuanto a la reclamación formulada tanto por el Congreso como por el Senado de que el Ejecutivo reconozca a González como presidente electo de Venezuela, como le ha recordado alguno de los portavoces, Albares ha incidido en que solo dos países han dado este paso hasta la fecha: Ecuador y Panamá; y ha animado al PP a que “se sume al consenso internacional” y la postura que también defiende hasta la fecha la UE.

El ministro Albares ha anunciado también que el Gobierno venezolano ha autorizado que se pueda prestar atención consular a los dos españoles detenidos por su presunta implicación en un complot para desestabilizar al Gobierno de Nicolás Maduro y del que la justicia de Venezuela acusa a la oposición y a los servicios secretos de España o Estados Unidos.

Hoy mismo, ha explicado el ministro, “Venezuela nos ha manifestado por nota verbal que podemos ejercer la oportuna protección consular” como se había venido reclamando desde que se conoció su detención. Albares ha dejado claro que realizará “todas las gestiones” a su alcance “para que cuanto antes estén donde siempre han tenido que estar, en nuestro país, con sus familias”. “No voy a escatimar esfuerzos en ello como no lo hice en su momento con Juana Ruiz, detenida en Israel, o con Ana Baneira y Santiago Sánchez, retenidos en Irán”, ha remarcado.

Albares ha dicho que ha trasladado al canciller venezolano, Yván Gil, que José María Basoa y Andrés Martínez Adasme “están injustamente retenidos” y que no da “ninguna credibilidad a los cargos que pesan contra ellos” así como que “no tienen ningún vínculo con ninguna institución pública española, mucho menos con el CNI”, como se señaló desde Caracas.