La directora ejecutiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Natalia Kanem, afirmó este jueves que una de las acciones más urgentes que el mundo debe tomar en busca de la igualdad es la protección y la promoción de los derechos de las niñas y adolescentes, que van desde la educación hasta su salud sexual.
"Es una emergencia cuando vemos la desigualdad. La acción más urgente es proteger, respetar y promover los derechos de las niñas y adolescentes hacia su madurez", afirmó Kanem en una entrevista con Efe en Costa Rica.
La directora de UNFPA participa en Costa Rica en una Reunión de alto nivel sobre igualdad y derechos humanos para los pueblos afrodescendientes, en el que participan representantes de una veintena de países de América Latina y el Caribe.
"Es trágico que mucho del potencial de las niñas afrodescendientes se trunque porque nunca tuvieron la oportunidad de finalizar su educación, nunca tuvieron la oportunidad de liderazgo en sus comunidades", manifestó Kanem.
Una de las áreas de trabajo de UNFPA en América Latina y el Caribe es el de empoderar niñas y prevenir el embarazo adolescente, pues esta región tiene la segunda tasa más alta de este tipo de embarazos después de África.
"La salud sexual y reproductiva es fundamental y podemos hacer algo al respecto. Es urgente tomar medidas que permitan a las niñas conocer su cuerpo, que es parte de conocer su vida y también ser parte del mundo", comento Kanem.
La directora de UNFPA señaló como punto clave trabajar con padres de familia y con personas que sean importantes en las comunidades como por ejemplo figuras religiosas y profesores, con el fin de hacerles entender "que para que una niña sea protegida debe conocerse a sí misma y su valor".
"Es urgente repetir una y otra vez que la niña afrodescendiente es inteligente, es hermosa y capaz. Ayudarla a tener éxito en un mundo muy competitivo y que un embarazo adolescente le puede descarrilar el resto de su vida", dijo.
Kanem también señaló la discriminación y el racismo como dos problemas constantes que las sociedades deben esforzarse por combatir y erradicar.
"Es importante saber que la historia muestra que podemos superar el racismo y la discriminación y que podemos ayudar a los jóvenes a tomar su lugar como líderes en la sociedad. La mejor manera de interrumpir la discriminación es que la persona puede levantar la voz y ser apoyada", apuntó.
En América Latina y el Caribe hay aproximadamente 200 millones de personas afrodescendientes. De ellas, muchas se encuentran en una condición de desventaja que genera un impacto para el acceso igualitario a la educación, la justicia, los servicios de salud, empleo y vivienda.
Según un informe del Banco Mundial presentado el año anterior, las personas afrodescendientes en América Latina y el Caribe tienen 2,5 veces más de probabilidades de vivir en pobreza y menos posibilidades de terminar estudios en primaria.
Kanem afirma que los jóvenes de América Latina y el Caribe son "inteligentes y están listos para avanzar hacia cambios positivos", pero que también se debe prestar mucha atención al dolor que causa el rechazo del que muchas veces son víctimas.
"Me siento muy positiva de que las niñas y adolescentes, y también los jóvenes tienen una comprensión totalmente diferente de la igualdad de género de la que tuvo mi generación y las anteriores", comentó.
Todas estas problemáticas serán abordadas del 12 al 14 de noviembre en Nairobi en una Reunión de alto nivel en el 25 aniversario de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, en la cual participaran Gobiernos, donantes, academia, sociedad civil, organizaciones y activistas.
Kanem afirmó sentirse "muy emocionada" con esa reunión, que es copatrocinada por los Gobiernos de Kenia y Dinamarca.
"Cada quien que vaya a la conferencia debe hacer un compromiso, no es una conferencia solo para hablar, es venir preparado para presentar sus compromisos en busca de acelerar cambios buenos para los derechos y decisiones de las niñas y las mujeres del mundo", expresó.
Según Kanem, tras 25 años de esta conferencia, se han logrado "progresos", pero aún hay muchos retos pendientes en temas como cobertura de salud, violencia, derechos sexuales y reproductivos, pobreza, entre otros.