El Sistema de las Naciones Unidas en Bolivia hizo este martes un "llamado clamoroso" a rechazar la violencia en los "difíciles momentos" que enfrenta el país, donde las protestas de contrarios y afines al presidente Evo Morales no cesan tras las elecciones del pasado domingo 20 de octubre.
La representación de la ONU en Bolivia expresó en un comunicado su "mayor preocupación ante los graves hechos de violencia" registrados en diversas regiones bolivianas y lamentó "profundamente" que haya "enfrentamientos entre ciudadanos".
"Naciones Unidas hace un llamado clamoroso y urgente a los actores políticos, a los sectores sociales, y a todas y todos los bolivianos a reducir tensiones y rechazar todo acto de violencia en estos difíciles momentos que enfrenta el país", indica la nota.
El organismo también apeló a las autoridades para que garanticen el ejercicio de derechos fundamentales como la libertad de expresión, opinión y "el derecho de manifestarse pacíficamente".
Además, les instó a cumplir "con su obligación de proteger a toda persona de cualquier acto de violencia" y llamó a todos los sectores a que su derecho a la protesta se desarrolle "sin incitar a la confrontación y bajo ninguna forma de discriminación".
"La violencia en todas sus formas es incompatible con los valores de un sistema democrático", recordó el organismo e instó a contribuir "a la preservación de un clima de tolerancia, de paz y de respeto a los derechos humanos".
La entidad concluyó ratificando la convicción de que "se debe promover el diálogo" para hallar soluciones a los "desafíos" del país y "resguardar la integridad de todas las personas".
Bolivia vive continuas protestas desde que tras las elecciones la oposición y movimientos cívicos denunciaran un fraude electoral a favor del presidente Morales, a quien dio por vencedor el resultado definitivo publicado por el órgano electoral.
Las movilizaciones continuaron en esta jornada con nuevos episodios de violencia en ciudades como La Paz y Cochabamba, en las que tuvo que intervenir la Policía para separar a afines y contrarios al mandatario.
Los resultados definitivos dieron ganador a Morales, que gobierna el país desde 2006, con el 47,8 por ciento de los votos, frente al 36,51 del expresidente Mesa.
Esta diferencia del 10,57 por ciento es suficiente para que el gobernante gane en primera vuelta, con tan solo un 0,57 de margen.
La ley electoral exige el 50 por ciento de los votos más uno o el 40 con 10 puntos de ventaja sobre el segundo para vencer en primera vuelta, pero cuando no se logran estos porcentajes, se va a segunda ronda entre los dos más votados.