La Fiscalía sueca ha retirado los cargos por violación abiertos en 2010 contra Julian Assange, fundador de Wikileaks.
"La denunciante ha presentado un relato creíble y fiable, sus explicaciones son claras, largas y detalladas. Pero considero que la situación probatoria se ha debilitado en tal grado que ya no hay razones para continuar la investigación", ha afirmado en rueda de prensa la fiscal superior Eva-Marie Persson.
Continuar la investigación e interrogar a Assange no supondría un cambio "decisivo" en la situación probatoria, que no es suficiente para elevar una acusación, ha afirmado la fiscal. La decisión se ha tomado después de entrevistar a siete testigos del caso.
La Fiscalía sueca emitió en noviembre de 2010 una orden de arresto europea contra Assange, detenido un mes después en Londres, y a partir de ahí comenzó un proceso judicial que culminó en junio de 2012, cuando el Supremo británico reafirmó la extradición a Suecia y el periodista se refugió en la embajada ecuatoriana en Londres.
Assange evitó entonces la extradición durante siete años gracias a su condición de asilado en la embajada. Ante la imposibilidad de actuar, la Fiscalía sueca cerró la investigación en 2017. Dos años más tarde, en abril de 2019, Ecuador le retiró la protección y Assange fue detenido por las autoridades británicas y posteriormente condenado a 50 semanas de cárcel por haber violado las condiciones de libertad condicional. Actualmente cumple condena en la prisión de Belmarsh, en Londres.
Persson ordenó poco después de su detención la reapertura del caso en Suecia por violación, pero ha vuelto a cerrarlo tan solo seis meses después.
Assange espera ahora que el Reino Unido decida sobre su extradición a Estados Unidos, donde se enfrenta a una pena de hasta 175 años por cargos como espionaje y publicación de documentos clasificados, según ha denunciado Wikileaks. El juicio de extradición se celebrará en Reino Unido en febrero de 2020.
Kristinn Hrafnsson, WikiLeaks editor-in-chief: “Let us now focus on the threat Mr Assange has been warning about for years: the belligerent prosecution of the United States and the threat it poses to the First Amendment.?"
— WikiLeaks (@wikileaks) November 19, 2019"Permítannos centrarnos ahora en la amenaza que Asange ha estado advirtiendo durante años: la acusación beligerante de EEUU y la amenaza que supone a la Primera Enmienda", ha afirmado Kristinn Hrafnsson, editor jefe de Wikileaks.
En mayo, tan solo un mes después de su detención en Reino Unido, la Fiscalía de EEUU imputó a Assange 17 nuevos cargos por publicar material militar clasificado y documentos diplomáticos en el año 2010, atentando contra la seguridad nacional. Finalmente, en junio, EEUU pidió formalmente la extradición de Assange. Cuando Assange fue detenido, antes de que EEUU anunciase los nuevos cargos contra él, el Departamento de Justicia informó que se enfrentaría a "una pena máxima de cinco años".