La Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) sugirió este miércoles mantener la independencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) mexicana ante el polémico nombramiento de Rosario Piedra Ibarra como su presidenta.
Piedra Ibarra fue en 2018 candidata al Congreso por el gubernamental Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y ejerció como secretaria de Derechos Humanos del Comité Ejecutivo Nacional de este partido, al que no había renunciado como militante hasta el día de su elección.
Esa cercanía al Ejecutivo generó críticas entre la oposición, que consideraba que la CNDH no podría mantener su independencia, un recelo que confirma la ONU-DH en el comunicado emitido hoy.
La ONU-DH consideró que, dada la importancia de la CNDH, el proceso de elección de su máximo responsable debe ser "particularmente escrupuloso, objetivo, transparente y certero".
Argumentó que en este caso el proceso ha generado "dudas sobre el cumplimiento de los requisitos de elegibilidad de la candidata a quien se tomó protesta y cuestionamientos respecto a si en la tercera votación se alcanzó la mayoría calificada que exige la Constitución".
La ONU recordó "la crisis de derechos humanos por la que atraviesa México" y por eso llama a la CNDH "a ejercer un rol activo en la defensa de todos los derechos humanos sobre la base del principio de indivisibilidad e interdependencia de los mismos".
Piedra Ibarra sumó en su nombramiento en el Senado, celebrado el 7 de noviembre en el senado, 76 votos, los necesarios para alcanzar la mayoría calificada, aunque el evento estuvo rodeado de polémica.
La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) desechó un recurso contra el proceso de elección que había presentado un particular con el alegato de que sus derechos electorales habían sido vulnerados.
El TEPJF falló que ese acto "no se podía considerar de naturaleza electoral".
Piedra Ibarra, de 68 años, es hermana de Jesús Piedra, miembro de la Liga Comunista 23 de Septiembre, un grupo armado clandestino, y quien fue capturado y desaparecido por la Dirección Federal de Seguridad en la década de 1970 y por el que su madre, Rosario Ibarra, emprendió una larga búsqueda.