El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha alabado la dictadura chilena de Augusto Pinochet, asegurando que si no fuese por él, hoy Chile sería como Cuba. El brasileño ha hecho estas declaraciones para atacar a la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, que poco antes había criticado el aumento de las ejecuciones policiales en Brasil y la "reducción del espacio civil y democrático"
"Señora Michelle Bachelet: si no fuera por el personal de Pinochet, que derrotó a la izquierda en 1973, entre ellos a su padre, hoy Chile sería una Cuba". El padre de Bachelet fue torturado y murió encarcelado durante la dictadura.
"Hemos visto un gran aumento en los niveles de violencia policial en 2019 en un contexto en el que el discurso público legitima las ejecuciones sumarias", había advertido Bachelet, que destacó que la población negra y los residentes de las favelas son los más afectados.
El ministerio de Exteriores brasileño también ha respondido a las declaraciones de Bachelet: "En momentos en que Venezuela, por ejemplo, vive una crisis humanitaria en escala sin precedente y que afecta a toda la región, la alta comisionada tendría que concentrar sus esfuerzos en asuntos más urgentes y evitar precipitaciones y falsedades al comentar la política interna de un país democrático como Brasil".
El ataque personal de Bolsonaro ha generado críticas de casi todos los sectores políticos chilenos, incluso del presidente del país, Sebastián Piñera, un aliado del mandatario brasileño y quien alegó no compartir "en absoluto" la alusión hecha por su homólogo respecto a Bachelet, "especialmente en un tema tan doloroso como la muerte de su padre".
"No es la primera vez que la alta comisionada se refiere a Brasil sin respetar la verdad: recientemente, antes de que fuesen concluidas las investigaciones sobre la causa de la muerte de un indígena wajapi, se precipitó al afirmar que se trataba de un asesinato, lo que más tarde se reveló falso", señala el Ministerio de Exteriores en su comunicado.
Según la cancillería, la valorización de las actividades de la policía "constituye componente fundamental de este proyecto" y comienza a mostrar resultados con la reducción en un 21,2% de la tasa de homicidios en Brasil en los primeros cuatro meses de 2019.
"Otra grave imprecisión de la alta comisionada fue la supuesta reducción del espacio de la sociedad civil en Brasil. Al contrario de lo que infiere sin cualquier evidencia concreta, el espacio cívico y democrático se encuentra vivo y en expansión en Brasil", afirma el Ministerio de Exteriores.