Rusia camina con paso firme hacia su completo aislamiento digital. Siguiendo el modelo chino, el Kremlin lleva años preparando al país con leyes e infraestructura para desconectarse del Internet global y basar su digitalización en la 'Runet', una red propia controlada y censurada por oligarcas del círculo más próximo a Vladímir Putin. Esta semana, en la madrugada del miércoles al jueves, Rusia dio un paso más en los preparativos de la Runet y se desconectó por completo del resto de Internet durante dos horas.