El consumo de crudo en 2019 y 2020 será menor de lo calculado hasta ahora por la OPEP, debido a una generalizada, aunque leve, desaceleración del crecimiento económico causada por varios factores, desde la guerra comercial entre China y EEUU, a las incertidumbres del "brexit" y los problemas en Alemania.
En su nueva estimación de la demanda, hecha pública hoy, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) prevé que el mundo queme en 2019 una media de 99,84 millones de barriles de crudo al día (mbd), un 1 % más que el pasado año, pero por debajo de lo calculado el pasado mes.
En su informe de septiembre sobre el mercado petrolero, la OPEP justifica esa rebaja, de 80.000 barriles diarios, o un 0,08 %, en que los datos de consumo de la primera mitad del año han sido "más débiles de lo esperado" y a unas "proyecciones de crecimiento económico más lento para lo que queda de año".
Igualmente, el grupo energético sitúa su expectativa de demanda para el año que viene en 100,92 mbd, un 0,06 % menos de lo anticipado el mes pasado, debido a la necesidad de tener en cuenta los cambios en las perspectivas económicas para 2020.
En ese sentido, la OPEP estima que la economía mundial crecerá un 3 % en 2019 y un 3,1 % el año siguiente, 0,1 puntos respectivamente menos de lo esperado.
Al explicar esa desaceleración en 2019, la OPEP se refiere a una "combinación de numerosas tendencias".
Entre ellas cita una desaceleración en EEUU, especialmente en el sector manufacturero; a las incertidumbres relacionadas con el "brexit" y cómo afectarán a la eurozona; al menor de lo esperado crecimiento en India; a los problemas en Argentina, y a la "continuación de la disputa comercial EEUU-China".
El análisis mensual de la OPEP señala que "como se espera que algunas tendencias continúen en 2020", el crecimiento económico de Estados Unidos para ese año se revisa a la baja, del 2 al 1,9 %; y el de la eurozona del 1,2 al 1,1 % "dadas las crecientes incertidumbres en economías claves", como Alemania e Italia.
Pero, más allá de las economías más industrializadas, la OPEP espera crecimientos económicos más bajos de lo esperado también en China, India, Brasil o Rusia para 2020.
Con todo, la OPEP insiste en que el crecimiento económico puede ser mayor, si, por ejemplo, finalmente se logra un acuerdo para el "brexit" o se suavizan algunas tensiones geopolíticas.
Pese a la revisión a la baja del crecimiento del consumo de crudo, la OPEP sigue esperando que en 2020 se supere por primera vez la barrera de los 100 millones de barriles diarios, empujando esencialmente por el aumento de la demanda en China e India.
Los países más industrializados de Europa, por contra, consumirán un 0,21 % menos que este año, mientras que en Estados Unidos y Latinoamérica se preven aumentos del consumo del 0,69 y del 1,14 %, respectivamente.
En relación a la oferta, la OPEP indica que su producción subió el pasado agosto, según fuentes secundarias, hasta los 29,7 mbd, pese a la fuerte caída en Venezuela, que descendió un 5,7 %, e Irán, que bajó un 1 %.
Venezuela experimentó así la bajada más significativa en el bombeo de crudo de entre los catorce miembros que componen la OPEP.
Respecto a la oferta para el año que viene, la OPEP espera que sus competidores pongan en circulación 66,65 mbd, un 3 % menos de lo esperado hasta ahora, debido a un menor aumento de la producción en Estados Unidos, el mayor extractor del mundo.
Respecto a su propio crudo, la OPEP espera colocar en 2020 en el mercado 29,4 mbd, un 1 % por debajo de su actual bombeo conjunto.
La OPEP asegura también en su informe que la estrategia de reducir la producción en 1,2 mbd hasta marzo de 2020, pactada por sus catorce socios y varios productores más, como Rusia, ha contribuido a estabilizar el mercado del crudo.