El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, ha asegurado que el banco ha "aparcado" la búsqueda de un socio industrial para Nueva Pescanova, por lo que en la actualidad está abordando un proceso de posicionamiento de la compañía para fortalecer su proyecto empresarial, según recoge Europa Press.
Abanca controla el capital de la empresa de alimentación. La pasada primavera, llegó a un acuerdo con el grupo canadiense Cooke para negociar la venta de su 80% en Nueva Pescanova en una operación que valoraba la empresa en 800 millones de euros. Unas negociaciones que no han fructificado.
Ahora, Escotet asegura que Abanca ha priorizado la implantación del plan estratégico de Nueva Pescanova para "fortalecer" su proyecto empresarial, según ha indicado durante la presentación de los trabajos de transformación de la sede de Abanca en Vigo.
"Creemos que tiene mucho más valor ejecutar el proyecto y emplazar la búsqueda de socio industrial. Siempre habrá tiempo para eso. No es nuestra prioridad. La empresa va bien", ha reivindicado Escotet, tras ser preguntado por los medios de comunicación sobre la situación de Nueva Pescanova.
Escotet ha añadido que, para Abanca, la firma es "prioritaria" debido a su valor para Vigo y para Galicia, lo que se demuestra en el nivel de inversión que se ha ejecutado a lo largo de los últimos años.
Todo ello tras unos meses de negociaciones en la búsqueda de un socio industrial. Negociaciones que llegaron a su fin "de mutuo acuerdo", ha asegurado, por ambas partes, por lo que el propio banco decidió continuar su hoja de ruta, manteniendo la propiedad.
La nueva estrategia empezó con la incorporación de Jorge Escudero como nuevo consejero delegado el pasado mes de septiembre. En octubre, Nueva Pescanova dio luz verde a un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó a unos 76 trabajadores de oficinas.
Desde 2015, Abanca ha realizado, ha asegurado Escotet, un "considerable esfuerzo" para salvaguardar la viabilidad de la compañía y mantener los puestos de trabajo y su sede en Galicia.
