La Comisión Europea está analizando ya las reformas que España ha puesto en marcha en el marco del cuarto desembolso de los fondos vinculados al Plan de Recuperación y Resiliencia y es consciente de que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene, al menos por ahora, un suspenso: la reforma del subsidio de desempleo. Para el Ejecutivo, que siempre ha ido en cabeza de la ejecución del plan, sería un golpe que Bruselas haga un pago de parcial de los 10.000 millones de euros asignados a los cerca de 60 hitos recogidos en esa parte y está negociando ya la letra pequeña con el gobierno comunitario, que ve "prematuro" anticipar ese desenlace.
"En este momento es prematuro", ha respondido el vicepresidente económico, Valdis Dombrovskis, a una pregunta sobre la posibilidad de que el fracaso en la votación del subsidio del paro conlleve un desembolso parcial y ha recordado que la evaluación está en marcha. De hecho, ha abierto la puerta a ampliar los plazos y, por tanto, dar margen al Ejecutivo a tener lista la reforma que la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, está negociando con los agentes sociales después de que el Congreso, con el voto en contra de los cinco diputados de Podemos, rechazara el decreto.
Dombrovskis ha recordado que la ampliación de los plazos tiene antecedentes, por ejemplo, en el caso de Italia. España solicitó el cuarto desembolso el 20 de diciembre, después de que las últimas medidas del plan asociadas al mismo pasaran por el Consejo de Ministros. Desde entonces, lo normal es que haya un plazo de dos meses para el examen de Bruselas, pero en este caso ya se pidió una prórroga de un mes adicional debdo al parón navideño. Por tanto, la previsión es que la Comisión Europea se pronuncie a finales de marzo, salvo que se decida prolongar aún más.
"En este momento no puedo comentar el posible resultado de esta evaluación", ha señalado el letón, que ha dejado la pelota en manos del Gobierno: "Depende también de cómo afronten este asunto las autoridades españolas".
El asunto es una de las prioridades del recién estrenado ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que lo puso sobre la mesa en las reuniones que mantuvo con los responsables económicos de la Comisión Europea en sus primeras reuniones este lunes en Bruselas. “Estamos trabajando en paralelo en el ámbito doméstico para seguir avanzando en los hitos y objetivos que quedan por cumplir”, explicó Cuerpo en declaraciones a los periodistas: “Estas dos negociaciones tienen que evolucionar en paralelo para seguir teniendo esa señal de confianza y esos flujos que lleguen a la economía española”.