Bruselas da el visto bueno a los compromisos adquiridos por Renfe para liberalizar la venta de billetes online. La decisión es relevante para España porque logra así sortear un proceso sancionador que dio sus primeros pasos en abril con la apertura de una investigación por competencia desleal. La Comisión Europea entendía que Renfe estaba abusando de su posición dominante en el mercado al no proporcionar datos e información a las demás plataformas que ofrecen a los usuarios servicios de búsqueda, comparación, reserva y pago. El operador español se ha comprometido a hacer algunos cambios para compartir la información sobre billetes o descuentos con las plataformas que se dedican a ese negocio y la Comisión Europea las da por buenas.
"Los compromisos dan respuesta a las reservas preliminares de la Comisión en materia de competencia relacionadas con la negativa de Renfe a suministrar a plataformas competidoras de venta de billetes todo su contenido y datos en tiempo real relativos a sus servicios de transporte ferroviario de pasajeros", señala el gobierno comunitario en un comunicado.
El resultado es fruto de una negociación entre Renfe, la Comisión Europea y otros actores involucrados. Tras varios intercambios, Bruselas acepta los compromisos del operador español que tienen que ver con la puesta a a disposición de las plataformas de venta de billetes de terceros "todos los contenidos actuales y futuros y los datos en tiempo real mostrados en cualquiera de sus propios canales online".
Por otro lado, se establece un coeficiente medio mensual máximo de consultas-reservas (la relación entre las consultas realizadas y el número de ventas reales) no inferior a 600, 200 o 140, en función del número de solicitudes de disponibilidad realizadas por las plataformas. "Renfe solo podría suspender temporalmente el acceso de una plataforma competidora a su sistema de ventas únicamente si superara el coeficiente máximo de consultas-reservas aplicable, algo que afectaría negativamente al sistema de ventas de Renfe o amenazaría inmediatamente con obstaculizar la venta de billetes de esa compañía. Este mecanismo garantiza efectivamente que Renfe pueda funcionar sin soluciones de continuidad, preservando al mismo tiempo la competitividad de las plataformas de venta de billetes de terceros. Al mismo tiempo, garantiza la paridad entre estas plataformas de terceros y las propias plataformas de Renfe en relación con el coeficiente máximo de consultas-reservas aplicable y las consecuencias en caso de incumplimiento", recoge el gobierno comunitario.
Renfe también tiene que cumplir con unos estándares de calidad en sus servicios al imponerse una tasa de error (reservas fallidas) máxima del 4 % a partir de 2024 y una tasa máxima mensual de indisponibilidad del 1% a partir de 2025.
La decisión ha sido bien acogida por el sector. "El acceso a los mismos datos, tarifas, prestaciones y contenidos, tal y como las ofrecen las operadores, proporcionará al usuario una mayor capacidad de elección, y pondrá en sus manos más innovación y valor", señala Trainline en un comunicado. “Este anuncio es una victoria clara y rotunda para los usuarios del tren en España y Europa. Esta determinación por parte de la Comisión Europea sienta un importante precedente para el sector en Europa y se trata de la medida más reciente de las adoptadas por las autoridades de competencia europeas para impulsar la competencia en el sector", expresa el CEO, Jody Ford.