La Comisión Europea (CE) tiene "fuertes indicios" de que Broadcom infringió las reglas de competencia para reforzar su posición de dominio en los mercados de circuitos integrados de chips para decodificadores de televisión y módems, por lo que ordena a la compañía que abandone ya estas prácticas.
El Ejecutivo comunitario, que abrió una investigación a la tecnológica en junio pasado, pide a la empresa estadounidense que deje de aplicar ciertas cláusulas de sus acuerdos con algunos clientes para evitar un "daño irreparable" sobre la competencia hasta que concluyan sus pesquisas.
"El comportamiento de Broadcom podría, en ausencia de una intervención, crear un daño serio e irreversible a la competencia.
Es la primera vez que la Comisión impone medidas provisionales en dieciocho años, explicó Vestager en una rueda de prensa.
Broadcom tiene que aplicar las medidas en 30 días y estas deben estar en vigor durante tres años o hasta que se adopte una decisión final en la investigación, si el veredicto llega antes de que pasen esos tres años. Bruselas no tiene límite de tiempo para decidir.
La Comisión cree que está "justificado" imponer medidas preventivas porque, de no ser así, el comportamiento de Broadcom podría afectar a procedimientos de licitación en el futuro, en concreto para la introducción del estándar Wifi6, y podría dejar fuera del mercado o marginar a otros competidores y por consiguiente, una subida de precios para los consumidores.
En concreto, el Ejecutivo comunitario considera "a primera vista" que la empresa está abusando de su posición de dominio en los mercados de circuitos de chips para decodificadores de televisión, módems de fibra y módems xDSL al incluir ciertas cláusulas en sus contratos con seis fabricantes de estos productos.
Estas obligan a los clientes a comprar exclusiva o casi exclusivamente los chips de Broadcom o les confieren ventajas comerciales, como descuentos, a condición de que los adquieran.
Tras analizar las pruebas, la relevancia de los clientes y la duración de los acuerdos, la Comisión cree que las medidas preventivas son necesarias para evitar un daño irreparable.
Así, ordena a Broadcom dejar de aplicar estas cláusulas en los contratos existentes y no acordar las mismas disposiciones u otras que tengan el mismo efecto en otros acuerdos con estos clientes.
Vestager afirmó que la investigación "está muy avanzada" como para mostrar que "es probable que haya un daño grave e irreparable" y que esperan cerrarla antes de tres años.
La comisaria, que seguirá al frente de Competencia en la nueva Comisión, dijo que esta decisión no implica que tenga ya una lista de casos en los que aplicar medidas preventivas, pero sí que "la herramienta está sobre la mesa y si hay casos que cumplen las condiciones, usaremos las medidas preventivas con más frecuencia".
Vestager insistió en que al pedir estas medidas serán "cuidadosos y precisos" y no comprometerán los derechos de las empresas a defenderse.