La petrolera brasileña Petrobras obtuvo en los nueve primeros meses del año un beneficio neto de 31.984 millones de reales (unos 7.996 millones de dólares), con un salto del 35,1 % frente al mismo período de 2018, informó este jueves la mayor empresa de Brasil.
El buen resultado fue atribuido por la compañía tanto al aumento de la producción de petróleo y gas natural, que alcanzó volúmenes récords en el tercer trimestre, como a los ingresos obtenidos con el ambicioso programa de venta de activos no estratégicos de la empresa.
Igualmente fue atribuido a los esfuerzos de la nueva dirección de la compañía para reducir los gastos operacionales, que cayeron en un 51,8 %, hasta 18.894 millones de reales (unos 4.723,5 millones de dólares) en los nueve primeros meses del año.
Esa reducción permitió a la empresa, pese a la reducción de las ventas en valores, elevar no sólo su beneficio neto en el acumulado del año sino también su beneficio bruto de explotación (Ebitda) ajustado, que sumó 92.720 millones de reales (unos 23.180 millones de dólares) entre enero y septiembre, con una elevación del 8,2 %.
Los ingresos por ventas, afectados por la reducción de los precios del petróleo, cayeron en un 3,1 %, hasta 220.474 millones de reales (unos 55.118,5 millones de dólares) en los nueve primeros meses del año.
La petrolera informó igualmente que su beneficio neto en el tercer trimestre del año fue de 9.087 millones de reales (unos 2.271,7 millones de dólares), con un crecimiento del 36,8 % con respecto al mismo período de 2018.
El lucro del tercer trimestre, sin embargo, fue en un 51,8 % inferior al del segundo trimestre, cuando alcanzó el récord de 18.866 millones de reales (unos 4.716,5 millones de dólares) debido a los elevados ingresos que la empresa obtuvo por su programa de desinversiones.
La venta de activos en el segundo trimestre generaron ingresos por 21.200 millones de reales (unos 5.300 millones de dólares), en especial por la entrada de parte de los 33.500 millones de reales (unos 8.375 millones de dólares) que la francesa Engie pagó por la subsidiaria de gas TAG, con lo que el lucro de la empresa en el período fue más de cuatro veces superior al de los tres primeros meses del año.
El buen resultado trimestral fue atribuido por Petrobras al "aumento de la producción de petróleo y gas" y a las ganancias de capital generadas con la venta de acciones de la BR Distribuidora, otra de sus subsidiarias.
"El desempeño de la compañía en el tercer trimestre ya comienza a reflejar nuestra estrategia para generar valor", afirmó el presidente de la empresa, Roberto Castello Branco, en un mensaje a los accionistas.
El ejecutivo destacó que la producción de petróleo y gas de la empresa alcanzó un promedio récord de 3,0 millones de barriles equivalentes en agosto.
La producción promedio de petróleo y gas en el tercer trimestre fue de 2,878 millones de barriles diarios, igualmente récord y con un crecimiento del 16,5 % frente a la del mismo período del año pasado.
Castello Branco igualmente destacó que para el fuerte crecimiento de la producción contribuyó la extracción en los codiciados campos de presal, con cifras récord y que ya responde por el 60,4 % de la producción de la empresa.
El presidente de la compañía también señaló que la deuda bruta de la compañía cayó desde 101.029 millones de dólares en junio hasta 89.901 millones de dólares en septiembre gracias a diferentes estrategias de la empresa para ecualizar sus obligaciones.
La empresa además informó que redujo sus inversiones en un 25,3 %, desde 10.113 millones de dólares en los nueve primeros meses del año pasado hasta 7.556 millones de dólares entre enero y septiembre de este año, aunque aclaró que esa reducción correspondió principalmente a las inversiones de capital, es decir a las destinadas a aumentar la capacidad de los activos.