La sala de lo social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha considerado justificada la extinción colectiva de los contratos de los trabajadores de La Naval de Sestao (Bizkaia), por causas económicas, tras perder 208 millones de euros en los últimos cinco años.
El juzgado de lo social ya aceptó en marzo pasado los despidos, los sindicatos recurrieron y ahora ha sido el Tribunal Superior el que ha dictado un auto en el que acuerda la extinción colectiva de los contratos de trabajo, por entender concurrentes las causas económicas y productivas referidas por la Administración Concursal del astillero.
En el auto se detalla la situación económica del astillero, en liquidación: así, el último año en el que tuvo beneficios fue en 2012, con 7,2 millones de euros. En 2013 apenas tuvo unas pérdidas de 142.000 euros, pero se dispararon ya a partir del año siguiente.
Así, en los últimos cinco años los números rojos han sido los siguientes: en 2014, 12,1 millones de pérdidas: 2015, 15,7 millones; 2016, 79,5 millones; 2017, 37,9 millones, y 2018, 63,4 millones.
Paralelamente, la cifra de negocio -la facturación- también cayó en los tres últimos años, desde los 146 millones del 2016 a 90 millones en el 2017 y solo 20 millones en el 2018.
En el auto, la sala niega que haya habido "mala fe negocial" -como argumentaban los sindicatos- y se les haya generado indefensión alguna por falta de documentación y considera que "el hecho de que las negociaciones (con la empresa) acabaran sin acuerdo no significa que no haya existido buena fe".
