La Unión Europea (UE) sacó este viernes a Belice de su lista negra de paraísos fiscales, aunque aún debe hacer reformas, y a Macedonia del Norte de la denominada lista gris, tras haber cumplido con los cambios que prometió para cumplir las exigencias comunitarias en materia de cooperación fiscal.
Tras los cambios adoptados por el consejo de ministros de Economía y Finanzas de la UE, en la lista negra quedan ocho jurisdicciones: Samoa Americana, Fiji, Guam, Omán, Samoa, Trinidad y Tobago, las Islas Vírgenes de Estados Unidos y Vanuatu.
Belice sale de la lista negra tras haber aprobado las reformas para mejorar su régimen fiscal para las empresas internacionales que tenía que adoptar antes de finales de 2018.
El país pasa por lo tanto a la lista gris, puesto que aún debe enmendar o abolir algunas características de su sistema de exenciones fiscales a los ingresos de origen extranjero, que la UE considera perjudiciales, antes de finales de este año.
Macedonia del Norte abandona la lista gris, en la que se encuentran aquellas jurisdicciones en las que la UE ha detectado problemas pero que se han comprometido a implementar reformas.
El país, que aspira a unirse al bloque comunitario, ha ratificado la convención multilateral sobre asistencia administrativa mutua de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), cumpliendo así con todos los requisitos europeos.
La UE puso en marcha en diciembre de 2017 su primera lista negra de paraísos fiscales, que evalúa si terceros países cumplen unos requisitos mínimos de transparencia, justicia fiscal y respeto a las normas internacionales para evitar el traslado de beneficios y la erosión de la base imponible.
Los países revisan la situación periódicamente y actualizan el registro, que ha recibido críticas por no imponer sanciones a los países que terminan en la lista negra y por no aplicarse también a los Estados miembros de la UE.