El Banco Central de Chile acordó este miércoles mantener la tasa de interés de política monetaria en 1,75 %, pese al desplome en un 3,4 % interanual que sufrió la economía del país el pasado mes de octubre por los efectos de las protestas sociales, que caminan ya hacia su séptima semana.
La decisión fue adoptada por la unanimidad de todos los miembros del Consejo del emisor chileno, que mediante un comunicado informó de que no vislumbra en los próximos meses cambios en la tasa de interés, que había sido rebajada en 25 puntos hasta el 1,75 % actual el pasado 23 de octubre como medida para dinamizar la economía.
"En un contexto de mayor impulso fiscal e intervención cambiaria, el Consejo prevé que la tasa de política monetaria se mantendrá en su nivel actual durante los próximos meses", señaló el comunicado.
Además, el emisor reafirmó su compromiso de "conducir la política monetaria con flexibilidad" de manera que la inflación proyectada se ubique en 3 % en el horizonte de dos años.
En este sentido, señaló que en octubre la inflación anual se ubicó en 2,5 % y que las expectativas de mercado apuntan a que cerrará el año "en valores cercanos o algo por sobre 3 %, dando cuenta de la fuerte depreciación del peso" y que "a dos años plazo, las distintas medidas de expectativas se ubican en 3 %".
LA CRISIS HA PROVOCADO "CAMBIOS SIGNIFICATIVOS" EN LA ECONOMÍA
El análisis del Banco Central reflejó que la crisis social ha generado "cambios significativos" en diversos ámbitos de la economía chilena y los mercados financieros, "dando paso a un aumento en la incertidumbre (...), una mayor percepción de riesgo país, un deterioro de los indicadores bursátiles e incrementos en las tasas de renta fija y los spreads corporativos".
Las condiciones de crédito también se han afectado y hay una menor demanda por crédito en algunos sectores y una oferta más restrictiva para personas y empresas, evidenció el emisor.
La entidad también dio cuenta de que las expectativas de crecimiento para este año y el próximo se han deteriorado, quedando rebajadas por el Gobierno hasta el 1,4 % para 2019, lo que supone hasta 0,8 puntos menos con respecto al último ajuste, de entre el 1 y el 1,5 % para el 2020, frente al 2,3 % calculado.
Además, señaló que "el mercado laboral ya muestra signos de deterioro".
Respecto al mercado cambiario, expresó que el peso tuvo una importante depreciación que "se dio con una rapidez y sucesión de movimientos en la misma dirección que generó una volatilidad que se estimó excesiva", por lo que se vio motivado a intervenir poniendo 20.000 millones de dólares en venta.
GUERRA COMERCIAL CHINA-EE.UU. SIGUE INFLUYENDO
En el escenario externo, el Banco Central consignó que "los desarrollos en torno a la guerra comercial entre China y Estados Unidos siguen influyendo en el comportamiento de la actividad mundial y de los mercados financieros", a lo que se agrega el impacto de factores idiosincráticos en el peor desempeño de América Latina.
En este sentido, indicó que "la actividad y el comercio han estado en línea con lo esperado" con una política monetaria global que se ha mantenido expansiva y unos índices bursátiles han aumentado en las principales economías.
La crisis social chilena por un modelo económico más equitativo que comenzó el pasado 18 de octubre y hasta la fecha le ha costado la vida a al menos 23 personas.
Además de manifestándose pacíficas, el fenómeno ha dado lugar también a graves episodios de violencia, como saqueos, incendios y destrucción de mobiliario, que han afectado al comercio y la industria.