Costa Rica será sede del Congreso Internacional de Hidroelectricidad en mayo del 2021 con el objetivo de impulsar energías renovables, informó este miércoles el estatal Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).

El evento, que será del 26 al 28 de mayo de ese año en el Centro de Convenciones de Costa Rica, es organizado por el Gobierno de costarricense y contará con el apoyo del Grupo ICE, bajo el lema “Energías renovables trabajando juntas en un mundo interconectado”.

“Brindaremos nuestro conocimiento y experiencia para organizar con éxito el congreso. La Asociación reconoce el recorrido del país en la generación de electricidad con fuentes renovables.

Es una nueva oportunidad para exponer al mundo nuestro modelo de desarrollo”, explicó la presidenta ejecutiva del ICE, Irene Cañas.

Desde el 2015 Costa Rica registra al menos un 98 % de producción con fuentes renovables y cuenta con una cobertura forestal de más de 53 % del territorio. El objetivo es que toda la electricidad provenga de fuentes renovables en 2030.

Del total de la producción de 2019, el 67,5 % proviene del agua, el 17 % del viento, el 13,5 % de la geotermia y el 0,84 % de la biomasa y el sol. El restante 1,16 % corresponde a plantas de respaldo que utilizan combustible para operar.

El anuncio fue dado por la Asociación Internacional de Hidroelectricidad a una delegación costarricense que se encuentra Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático 2019 (COP25), celebrada en Madrid.

El Congreso Internacional de Hidroelectricidad es un encuentro de alto nivel que se efectúa desde 2007, cada dos años. Su edición más reciente tuvo lugar en París, durante 2019. Se ha llevado a cabo en Turquía, Islandia, Brasil, Malasia, China y Etiopía, mientras que Costa Rica será el primer país de Hispanoamérica que acogerá el evento.

En mayo pasado, el Proyecto Hidroeléctrico Reventazón, desarrollado en la provincia de Limón (Caribe) por el ICE, fue galardonado con el premio Blue Planet Prize, un reconocimiento mundial por las acciones ejecutadas durante el proceso constructivo que abarcó seis años, entre 2010 y 2016.

Las autoridades calculan que gracias al uso de las fuentes limpias, en los últimos 20 años el país se ha ahorrado unos 482 millones de dólares en combustibles fósiles.

La Asociación Internacional de Hidroelectricidad, que se formó en 1995, cuenta con más de 80 miembros representantes de países de los cinco continentes. Su objetivo es promover las prácticas sostenibles en los procesos de planificación, construcción y operación de centrales hidroeléctricas.