El consumo por habitante de los españoles continuó por debajo de la media de la Unión Europea (UE) en 2018, según los últimos datos publicados este viernes por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
La media de la UE, expresada en términos de Consumo Individual Efectivo (CIE) medido en función del Estándar de Poder Adquisitivo (SPA), es del 100 %, y España se sitúa a diez puntos del estándar europeo, con un 90 %.
La clasificación la lidera Luxemburgo con un 134 %, mientras que el consumo de los búlgaros se sitúa al final de la lista, con un 56 %, en línea con los datos publicados en los últimos años.
El CIE, una medida del "bienestar material de los hogares", según apunta Eurostat, mantuvo amplias divergencias entre los Estados miembros de la Unión siendo el nivel más elevado el de Luxemburgo, que se situó el 34 % por encima de la media comunitaria, seguido de Alemania, con el 20 %, y Austria, Dinamarca, Bélgica, Países Bajos, Reino Unido, Finlandia, Suecia y Francia, entre el 10 y el 20 %.
Otros catorce Estados miembros tuvieron un CIE por habitante entre la media de la UE y un 30 % menos.
Se trata de España, Italia, Irlanda, Chipre, Lituania, Portugal, República Checa, Malta, Eslovenia, Grecia, Polonia, Estonia, Eslovaquia y Rumanía.
En último lugar, cuatro países estuvieron por debajo de un 30 % menos de la media: Letonia, Croacia, Hungría y Bulgaria, este último a 44 puntos del estándar de los veintiocho.
En cuanto al producto interior bruto (PIB) per cápita, Eurostat también apunta que España se encuentra por debajo del estándar de la UE con un 90 %, situándose la media europea en el 100 %.
A nivel europeo, las diferencias son, a su vez, notables, ya que en 2018 el PIB per cápita fluctuó entre el 51 % de Bulgaria y el 261 % de Luxemburgo.