Pocos autos en el mundo tienen una imagen tan marcada como la Combi de Volkswagen, icónico vehículo de hippies y surfistas que cumple 70 años en 2020 como símbolo de un estilo de vida y de una región: California, estado por el que muchas todavía circulan y son más fotografiadas "que un Ferrari".
Siete décadas después de que saliese de las fábricas alemanas de Volkswagen, el lema de "Love and peace (amor y paz)" que despliega la Combi ha sido adoptado por generaciones venideras de rubios californianos e inmigrantes de todo tipo de procedencia.
Uno de ellos es el ya veterano "hippie" Rolando Alvarado, quien todavía maneja una restaurada Combi azul de 1960 por el Estado Dorado.
Sonriendo junto a su tabla de surf y su Microbús, otro de los nombres por los que se conoce a este pionero del transporte de pasajeros y mercancías, Alvarado dice a Efe que lo mantiene "coqueto" por pura "nostalgia", por el afán de "revivir los años" de su infancia cuando su padre manejaba una VW similar.
Este salvadoreño de 65 años pertenece al club de propietarios de clásicos Volkswagen "Mid-Life VW Crewzers" de California, quienes organizan exhibiciones en las que estos autos lucen como joyas.
"Mucha gente le toma más fotos a una Combi que a un Ferrari", asegura.
El Microbús comenzó a fabricarse en 1950 bajo el nombre de Tipo 2 como versión de transporte ligero del T1 o Escarabajo (Beattle), pero debido a su bajo precio y fácil mantenimiento los hippies y surfistas de California lo adaptaron a su estilo de vida en las siguientes dos décadas.
"California siempre ha sido la cuna de los 'hippies'", recuerda este salvadoreño de pelo largo y canoso sentado sobre su auto, que luce despintado y sin brillo aunque por un motivo muy especial: mantener la "valiosa pintura original de fábrica".
El microbús lo compró por 20.000 dólares hace cuatro años y desde entonces ya le invirtió otros 20.000 más en piezas originales y varias mejoras, como una cama con coloridas cobijas salvadoreñas para "descansar".
Su primer microbús, un VW rojo y blanco, lo mantuvo durante décadas y solo lo vendió hace cuatro años cuando cedió a las insistentes propuestas de compra de un médico "hippie".
Cuando Alvarado maneja su Combi actual rumbo a la playa escuchando baladas románticas de los años 60 y 70 siente "que regresa a esos tiempos" donde todo era "amor y paz".
Algo más joven que Alvarado es Douglas Gaylord, un surfista de 49 años que reside en San Diego, al sur de California, y posee dos microbuses VW: una Combi Samba de 1955, en rojo y café, valorada en 100.000 dólares.
Y la otra es un modelo comercial de 1960, en rojo y blanco, que compró por 1.200 dólares en 1988 y hoy remozada estima que vale 50.000.
"A mí me gustan las cosas fabricadas para durar por largo tiempo", dice a Efe Gaylord sobre su pasión por los VW. "Soy mecánico y cuando reparo las mías constato que el motor y la transmisión son obra de un genio".
Gaylord, con tabla de surf en mano, pertenece a la generación de hijos de "hippies" y explica que entre los más jóvenes propietarios de renovados microbuses hay un denominador común: "Nos gustan estos vehículos porque nos encanta la vida simple".
"Al encontrarnos con otros que manejan estos viejos microbuses nos da alegría vernos, siempre es un ambiente familiar", aseguró Gaylord, que al igual que Alvarado, participan en "shows" de VW en EE.UU., México y Europa.
Estos encuentros de amantes de las Combis son la demostración de que esta icónica marca se ha mantenido viva a lo largo de estas siete décadas.
Y de ello quiere sacar partido el fabricante alemán, que tiene previsto iniciar en 2022 la producción de una versión moderna y eléctrica del Combi, el I.D. Buzz, que promociona precisamente con una fotografía con dos tablas de surf sobre su techo y recorriendo una carretera junto al mar, probablemente californiano.
Pietro Zollino, vicepresidente ejecutivo de Comunicaciones de Volkswagen en EE.UU., indica a Efe que la versión futurística del Microbus representa el nuevo Volkswagen "orientado al futuro".
"La historia de éxito de las Combis, de manera especial en California, comenzó cuando el amor, la paz y la felicidad inspiraron al mundo", dijo Zollino.
Iván Mejía