Decenas de miles de personas han huido de sus hogares en la frontera siria con Turquía por miedo a los ataques del Ejército de Ankara en el marco de su campaña militar contra las milicias kurdosirias en el norte de ese país, mientras continúa elevándose la cifra de civiles muertos.
Más de 60.000 personas han dejado sus hogares en las últimas 36 horas en las poblaciones fronterizas con Turquía, concretamente en Darbasiya y Ras al Ain, que casi han quedado vacías, informó este jueves la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Turquía aspira a crear una "zona segura" entre Ras al Ain y Tal Abiad, en la que quiere reasentar a dos millones de refugiados sirios que actualmente acoge en su territorio y que huyeron de la guerra en Siria desde 2011.
Reubicar a esas personas es uno de los motivos por los que Ankara lanzó su ofensiva este miércoles, además de luchar contra los "terroristas", es decir, las milicias kurdosirias de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), consideradas tales por sus vínculos con el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda activa en Turquía.
El Centro de Coordinación y Operaciones Militares de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por kurdos y cuyo principal componente son las YPG, indicó en Twitter que al menos 9 personas murieron este jueves por los bombardeos turcos.
El doctor Hassan, miembro de la Media Luna Roja kurda, afirmó que en el hospital de Sehid Legerin en Tel Tamer, un pequeño pueblo cerca de la frontera con Turquía, han recibido diez cadáveres de personas fallecidas por ataques aéreos y de artillería, así como a 25 heridos, según un mensaje de audio distribuido por el colectivo de activistas Rojava Information Center (RIC) a los medios.
Asimismo, el médico señaló que hasta cuatro de ellos han sido asesinados mientras intentaban huir de la violencia.
Por su parte, las FSD apuntaron que entre los fallecidos este jueves hay dos niños alcanzados por un bombardeo turco contra la ciudad de Qamishli, una de las más pobladas del territorio que controlan los kurdosirios y de la que Damasco también domina una parte, incluido el aeropuerto.
Asimismo, las FSD informaron de que sus unidades han conseguido "repeler un ataque turco desde la frontera", con el que los enemigos pretendían "cruzar la frontera hacia el territorio del noreste de Siria".
Según las milicias, "tres vehículos fueron destruidos y más de 22 yihadistas fueron asesinados", en referencia a los combatientes de facciones rebeldes sirias, algunas de ellas de tendencia islamista, que respaldan a Turquía en su ofensiva.
Por otra parte, los rebeldes sirios afirmaron en Telegram que han arrebatado a los combatientes kurdos las posiciones de Mishrifah al Hawi, Barzan, Haj Ali y las granjas de Bani Mashhour.
Ante la ofensiva, el portavoz de las FSD, Mustafa Bali, informó en Twitter de que más combatientes se van a desplegar en la frontera para defender la zona.
Turquía lanzó la operación después de que Estados Unidos anunciara el domingo la retirada de sus tropas de esa región, donde se encuentran desplegadas en el marco de la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico, en la que las milicias kurdas han sido su principal socio sobre el terreno.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) advirtió hoy de que la escalada del conflicto en el norte de Siria puede causar "más sufrimiento humano y agregar nuevos desplazamientos a la que ya es la mayor crisis de desplazados en el mundo".
"Cientos de miles de civiles en el norte de Siria están ahora en peligro. Los civiles y la infraestructura civil no deben ser un objetivo ", declaró el alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi.
Después de ocho años, el conflicto sirio es el que ha causado un mayor número de desplazados en el mundo, con 5,6 millones de sirios que han huido del país y 6,2 millones que se han movido a otras zonas dentro de sus fronteras, según la ONU.
Turquía es el vecino que alberga a más sirios (más de 3,6 millones), lo que lo convierte en el principal país de acogida de refugiados del mundo.
Isaac J. Martín