El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, aseguró hoy que la OTAN está tratando de contener a su país de forma "agresiva" en vez de ofrecerle diálogo.
"En lugar de con diálogo, nos topamos con una contención agresiva de nuestro país", criticó el jefe de la diplomacia rusa durante su intervención en la cumbre ministerial que la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) celebra hasta mañana en Bratislava.
"La propuesta rusa para rebajar la tensión en la frontera rusa con países de la OTAN aún no ha recibido respuesta", insistió.
Lavrov reiteró sus críticas a la ampliación de la Alianza a países de su antigua esfera de influencia hasta las fronteras rusas, algo que, afirmó, es un motivo de tensión en el Este de Europa.
De hecho, Lavrov aseguró que se ha llegado a un nivel de tensión como no se veía desde la Guerra Fría.
Por ello, hizo un llamamiento a reducir la tensión en beneficio de todos.
"Es importante revertir esta tendencia", afirmó Lavrov, que demandó "una agenda europea" de seguridad, con un amplio espectro de temas.
El ministro ruso reclamó que la OSCE establezca una arquitectura de seguridad común, sin líneas de división entre el Este y el Oeste.
"La construcción de una comunidad de seguridad en amplio sentido debe ser nuestra absoluta prioridad", planteó.
Por último, Lavrov mostró su confianza en que la crucial cumbre que el 9 de diciembre reunirá en París a los líderes de Ucrania, Rusia, Francia y Alemania por vez primera desde 2016, dé un impulso a la aplicación de los Acuerdos de Minsk.
Esos acuerdos contemplan la convocatoria de elecciones locales en la región ucraniana de Donbás y la concesión del autogobierno a los separatistas si los comicios son declarados democráticos por observadores internacionales
"El punto clave del arreglo (del conflicto en Ucrania), algo que nadie puede eludir, sigue siendo un diálogo directo entre Kiev, por una parte, y Donetsk y Lugansk, por la otra", dijo en referencia a las autoproclamadas repúblicas separatistas pro rusas.
En las últimas semanas se han dado distintos pasos positivos -como intercambios de prisioneros y retiradas de fuerzas de ciertos frentes- como medida de confianza antes de la crucial cumbre de París.
La ocupación y anexión de la península ucraniana de Crimea por parte de Rusia en 2014 y, sobre todo, la lucha entre separatistas pro rusos y las fuerzas de Kiev, han enrarecido en los últimos años aún más las relaciones en el seno de la OSCE, creada en la Guerra Fría para fomentar el diálogo entre bloques.