Después de más de ocho meses de guerra en Gaza, las tensiones y divisiones en torno a la gestión del conflicto crecen en Israel, tanto entre sus dirigentes políticos y militares como en las calles, donde han vuelto las protestas contra el Gobierno de Benjamín Netanyahu, en el seno del cual también aumentan las discrepancias.
Este lunes, el primer ministro israelí disolvió el llamado Gabinete de Guerra, formado pocos días después del comienzo de la ofensiva contra Gaza, el pasado 7 de octubre, y en el que participaban exponentes de la oposición.