Los ayuntamientos españoles son los encargados de regular la presencia de pisos turísticos en pueblos y ciudades, pero el Tribunal Supremo acaba de abrir una nueva vía para limitar la proliferación de estas viviendas: las comunidades de vecinos. Los jueces de la Sala de lo Civil han resuelto el caso de dos comunidades de Oviedo y Donosti y han avalado que ambas vetaran la existencia de pisos turísticos en las viviendas de sus respectivos edificios al haber prohibido las actividades económicas en ellos.