El nuevo dueño de Twitter, el empresario multimillonario Elon Musk, ha anunciado que aplicará una "amnistía general" a las cuentas suspendidas la semana que viene, a menos que violado la ley o se hayan dedicado a un "spam escandaloso". Esto supone que el empresario abre la puerta a la vuelta de los usuarios que fueron expulsados de la red social por comportamientos tóxicos como la difusión de mensajes de odio, acoso a otros miembros de la red, incitaciones a la violencia o participación en campañas de difusión de bulos y manipulación.