Con muchos sectores económicos a la defensiva ante el tsunami de la COVID-19, grandes empresas españolas de los sectores de las telecomunicaciones, la energía o la perfumería han tirado de chequera durante los últimos meses para ganar tamaño en mercados exteriores. En plena pandemia y desafiando las lúgubres perspectivas para España, "las empresas españolas están enfrascadas en el frente de las fusiones y adquisiciones, pese a que el país es uno de los más afectados por el coronavirus", destacaba el martes el influyente Financial Times.
La última operación, conocida este miércoles, está centrada en las antípodas: la oferta pública de adquisición (opa) lazanda por Iberdrola sobre el 100% de las acciones de la compañía australiana Infigen.