En concreto, la clave de capital perteneciente al Banco de Inglaterra (14,3%) se repartirá entre el resto de bancos centrales, por lo que el capital suscrito seguirá siendo de 10.800 millones de euros al año.
Los bancos centrales pertenecientes a la eurozona tiene que realizar contribuciones anuales equivalentes al 100% de su capital suscrito, mientras que el resto de bancos centrales del Eurosistema únicamente tienen que aportar el 3,75%. En el caso de Reino Unido, este porcentaje equivale a 58 millones de euros, que serán devueltos a la autoridad londinense como parte del Acuerdo de Retirada de la UE.
El banco central que más verá aumentar su peso en el BCE será el Bundesbank, el banco central de Alemania, que pasará de un 18,3670% hasta un 21,4394%, por lo que tendrá que abonar 320 millones más al año.