El político ecologista Florian Schmidt se ha convertido en una destacada figura de la política local berlinesa. Lo ha hecho a base de ocuparse de uno de los grandes problemas de Berlín: la vivienda. Este hombre que pronto cumplirá 44 años trabaja en un austero edificio de titularidad pública de Berlín, en la sede del gobierno del distrito de Friedrichshain-Kreuzberg. Él es el responsable de obras, planificación y gestión urbana.
A diferencia de lo que ocurre con otros responsables de ese área en otros distritos de la ciudad, el nombre de Florian Schmidt suena a menudo en los medios de comunicación locales por su implicación en la lucha frente a los problemas habitacionales a los que se viene enfrentando la capital alemana.