"Mi familia y yo hemos sobrevivido de milagro. Mi casa ha sido destruida esta noche por bombardeos israelíes. La zona en la que vivo fue sometida a bombardeos de los aviones de combate durante casi dos horas y he vivido junto a mi querida esposa y mi hijo las dos horas más largas y horribles de mi vida. Estábamos seguros de que no sobreviviríamos y que moriríamos con cualquiera de esas bombas".
Así arranca la carta enviada por el abogado y activista de derechos humanos Raji Sourani tras el bombardeo de su casa en la ciudad de Gaza la semana pasada.