La sociedad nos dice que se celebran los comienzos y se guarda luto en los finales. Las relaciones se oficializan con una fiesta en forma de boda, y se lloran las separaciones, que suelen ser traumáticas y tristes. Quizás se le tendría que dar la vuelta, y aprender a desprenderse de las cosas. Fernando Trueba siempre le dijo a su hijo Jonás que las relaciones habría que concluirlas con una fiesta en la que invitar a amigos y familiares.