El escritor Vincenzo Latronico no exagera cuando dice que su nueva novela Las perfecciones es un homenaje a Las cosas de Georges Perec. Su reconocimiento es tan intencionado que ambas obras empiezan de la misma manera: con una descripción detallada de un piso en el que más tarde se sabrá que vive una pareja joven. El del autor francés está en el París de los años 60 y el del italiano, en el Berlín de los 2000 y cada uno tiene sus propias características, pero ambos recorridos por las casas se leen como si se tratase de un catálogo de una tienda de muebles o un artículo meticuloso de una revista de decoración.