Madrid amanece en la terraza del hostal América, donde Wilfredo Robles (52) se encoge de frío dentro de su abrigo. “Soy el abogado que el sistema repudia”, se define. Líderes sindicales, campesinos, maestros… fueron ellos quienes, ante el encarcelamiento del expresidente de Perú Pedro Castillo, propusieron a Robles para afrontar la defensa. El entonces líder se enfrenta, entre otras acusaciones, al presunto delito de rebelión por el que la Fiscalía ha decretado 18 meses de prisión preventiva.
Con cinco presidentes en los últimos cuatro años, desde el pasado 7 de diciembre Perú afronta una nueva crisis política tras la llamada a disolver el Congreso y formar un gobierno de excepción por parte del expresidente.