El wéstern es el género cinematográfico americano por excelencia. A través de él, configuraron un imaginario y lo trasladaron a la gente. La fundación de EEUU como país se contó gracias a un género en el que se idealizó lo que, históricamente, fue un genocidio. El de las comunidades nativas que fueron aplastadas por aquellos que les colonizaron. En el cine de Hollywood los vaqueros eran los buenos y los indios eran los villanos. Había que cazarles y aniquilarles.