Maxim Renahy (Grande-Synthe, 1978) trabajó de espía para los servicios secretos franceses en Jersey, uno de los "peores paraísos fiscales" del mundo, según los términos de la Red para la Justicia Fiscal. Renahy trabajó en esa isla británica situada en el Canal de la Mancha para el gabinete de abogados Mourant. También estuvo al servicio de Mourant en Luxemburgo. Pensando en que las autoridades francesas perseguirían a las empresas que recurrían a esos paraísos fiscales para cometer actividades fraudulentas, entregó información comprometedora a la que él tenía acceso al servicio de la Dirección General de la Seguridad Exterior de Francia (DGSE), los servicios de inteligencia galos.