Con muy poco tiempo para recuperar espacio electoral, congelado estos días por varios episodios negativos, el presidente Jair Bolsonaro ha retomado en las últimas horas la línea de cuestionamiento a la legitimidad del proceso electoral. En un encuentro improvisado con la prensa en las puertas del Palacio de la Alvorada, la residencia presidencial de Brasilia, adonde llegó anoche procedente de Minas Gerais, el jefe de Estado informó que había presentado una denuncia en la Corte Suprema contra los magistrados del Tribunal Superior Electoral (TSE), con quienes anoche resolvió reabrir las antiguas disputas.