Cuando el iraní Matin Tamizi llegó indocumentado a Estados Unidos con seis años de edad, su madre guardaba el salario de sus tres empleos en un sobre bajo la cama, una historia que lo marcó para crear en México una tecnofinanciera ("fintech") después de dejar su empresa en San Francisco.
Aunque Tamizi es ciudadano estadounidense y en 2008 cumplió su sueño de llegar a Silicon Valley, vendió su compañía en 2015 para fundar una aplicación de inclusión financiera en México, donde él percibe una mayor oportunidad, pues en el país solo hay 54 bancos, en comparación con los más de 8.000 en Estados Unidos.
Leer más: El emprendedor iraní que dejó EE.UU. para crear una "fintech" en México